Cinco donantes distintos pero iguales

"En los cinco genomas que hemos descifrado no hay modo de diferenciar una etnia de otra", declar¨® ayer en la Casa Blanca Craig Venter, al informar de que la investigaci¨®n de la empresa Celera est¨¢ utilizando el material gen¨¦tico de tres mujeres y dos hombres que, seg¨²n su aspecto f¨ªsico y sus propias declaraciones, pertenecen a cuatro grupos distintos. Venter inform¨® de que en ese quinteto hay un hispano, un asi¨¢tico, un afroamericano y un caucasiano, la f¨®rmula que en EE UU describe a los blancos europeos.

Incluso para un defensor de la tolerancia, la diversidad y los derechos humanos como ¨¦l, lo sorprendente, se?al¨® el ex miembro de Proyecto Genoma Humano y hoy presidente de Celera, es que la investigaci¨®n cient¨ªfica descarta cualquier pretensi¨®n de realismo y racionalidad de los comportamientos racistas.

Ni blancos, ni negros, ni amarillos. Los mapas gen¨¦ticos de los seres humanos pueden reflejar la gran variabilidad de rasgos y caracter¨ªsticas del ser humano (altura, color de ojos o tendencia a determinadas enfermedades) pero no permiten apoyar el concepto de raza como divisi¨®n a priori que no se apoya en datos, corroboraron los cient¨ªficos de Proyecto Genoma Humano que hablaron ayer en Washington y Londres.

"Este descubrimiento es la corroboraci¨®n de la Declaraci¨®n Universal de Derechos Humanos", declar¨® John Sulston, director del laboratorio Sanger Centre de Cambridge, participante en el proyecto p¨²blico. "Nadie", a?adi¨®, "puede considerar a otra persona como inferior a causa de su c¨®digo gen¨¦tico; las legislaciones tienen que dar nuevos pasos para garantizar que todo el mundo es tratado de la misma manera".