Gonz¨¢lez perder¨¢ siete falanges por sus congelaciones en el Everest

"Pensaba que s¨®lo me iba a quedar con los pulgares", se consuela Juan Carlos Gonz¨¢lez, que alcanz¨® la cima del Everest por su vertiente tibetana el pasado 27 de mayo. El alpinista vitoriano, originario de Cantabria, perder¨¢ cuatro falanges de la mano izquierda y tres de la derecha, consecuencia directa de una noche de fr¨ªo extremo vivida a 8.600 metros: ahora se recupera en el hospital MAZ de Zaragoza, especializado en congelaciones.La Diputaci¨®n de Vizcaya, promotora de la expedici¨®n Euskaltel con la que convivi¨® en el Everest, contact¨® ayer por tel¨¦fono con Gonz¨¢lez durante una rueda de prensa a la que asisti¨® Willy Ba?ales, uno de los integrantes del grupo, que completaban los guipuzcoanos Edurne Pasaban y ?ngel Navas y el alav¨¦s Iosu Feij¨®o.

Gonz¨¢lez fue el ¨²nico espa?ol en llegar a la m¨ªtica cima en una primavera marcada por una climatolog¨ªa cambiante dominada por fuertes vientos y fr¨ªo. El escalador emple¨® ox¨ªgeno artificial para pisar la cima mientras el resto de las expediciones que conviv¨ªan en el campo base avanzado se retiraba.

El veterano alpinista, de 48 a?os, alcanz¨® tarde y extenuado la cumbre, lo que le vali¨® una noche de fr¨ªo e incertidumbre a 8.600 metros. Durmi¨® protegido por una funda de vivac, consumiendo ox¨ªgeno embotellado que encontr¨® durante el descenso -lo que le salv¨® de congelaciones en los pies- y alcanz¨® a duras penas el campo 3, donde un compa?ero argentino, en primera instancia, y otros dos italianos, m¨¢s tarde, le condujeron hasta el base avanzado. Gonz¨¢lez podr¨¢ "hacer vida normal" cuando se recupere de sus amputaciones, aseguran los m¨¦dicos que le tratan.