El desembarco popular

La llegada al puerto de Babiloni supuso un fuerte incremento de personal. Las afinidades pol¨ªticas del partido en el poder no se pod¨ªan disimular. Una de las primeras incorporaciones fue la de un compa?ero de colla festiva. Manuel Ramos obtuvo plaza de ch¨®fer del presidente. El contrato se le renov¨® hasta afianzarse en el segundo nivel del organigrama. Ramos ha llegado a jefe de divisi¨®n, depende directamente de Babiloni y ha duplicado su sueldo, hasta alcanzar los seis millones de pesetas anuales.Bajo la gesti¨®n de Babiloni, quien ocupa tambi¨¦n la vicepresidencia de la Fundaci¨® Caixa Castell¨®-Bancaixa, se incorporan al puerto dos concejales del PP. Mar¨ªa Fernanda Vidal, entonces delegada de Juventud del Ayuntamiento de Castell¨®n, consigui¨® la plaza de jefa de la unidad de recursos humanos, cargo en el que ces¨® en julio del pasado a?o para incorporarse al gabinete del presidente de la Diputaci¨®n. Otra edil popular, en este caso de Vinar¨°s, tambi¨¦n obtuvo acomodo en aquel puerto del Baix Maestrat.

Babiloni, casado con la excandidata a la alcald¨ªa de Castell¨®n por AP y a las auton¨®micas por el PP en 1999, no duda en facilitar las cosas a su nuevo partido. El ¨²ltimo caso es el de Marta Arrufat, hija del jefe de la Policia Auton¨®mica en Castell¨®n, adscrita como secretaria de presidencia desde octubre del pasado a?o. Hasta aquel momento hab¨ªa desempe?ado las funciones de jefa de prensa en la sede de los populares castellonenses.