La octogenaria Chata de Vallecas, detenida por supuesto narcotr¨¢fico
La anciana ha sido arrestada en otras 24 ocasiones
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Esperanza Castej¨®n P¨¦rez, de 82 a?os, conocida como La Chata de Vallecas, fue detenida el pasado jueves por agentes de la comisar¨ªa de Puente de Vallecas acusada de tr¨¢fico de estupefacientes. Esta octogenaria es una vieja conocida de la polic¨ªa, que ya la ha arrestado otras 24 veces por delitos similares. Su avanzada edad hace que quede libre de inmediato, igual que ha sucedido ahora: ayer estaba de nuevo en su casa.
La detenci¨®n se efectu¨® en su domicilio, en la calle del Doctor Lozano, n¨²mero 33. Se trata de una vivienda antigua, de planta baja y por la que acostumbran a desfilar un gran n¨²mero de toxic¨®manos durante todo el d¨ªa. Este incesante trasiego fue denunciado tanto por los vecinos de La Chata de Vallecas como por los padres de los ni?os que asisten a una guarder¨ªa que regentan los salesianos en el n¨²mero 29 de la misma calle.Los agentes de la comisar¨ªa de Puente de Vallecas vigilaron la zona para corrobar las frecuentes visitas de los drogodependientes. Tras llamar a la puerta, siempre les atend¨ªa la anciana. ?sta era la que les suministraba las papelinas de coca¨ªna y hero¨ªna, seg¨²n inform¨® ayer la Jefatura Superior de Polic¨ªa. Los polic¨ªas incautaron sendas sustancias a siete clientes cuando fueron registrados tras abandonar la vivienda.
Tras pedir el correspondiente mandamiento judicial para entrar y registrar la vivienda, los agentes se incautaron de cuatro papelinas de hero¨ªna, 11 de coca¨ªna, 20,7 gramos de coca¨ªna en una peque?a bola, 13,10 gramos de hero¨ªna en el mismo estado, 84.000 pesetas en efectivo, una balanza de precisi¨®n y ¨²tiles para mezclar y adulterar el estupefaciente.
"Hartos de tanto 'yonqui"
Los vecinos de La Chata se?alaron ayer que estaban "cansados" de denunciarla, porque siempre queda libre a las pocas horas de ser detenida. "Se vale de que es muy mayor para ir a la c¨¢rcel, por lo que la ponen en libertad y contin¨²a vendiendo todo lo que quiere. La verdad es que ya estamos hartos de ver a tanto yonqui por el barrio y a todas horas del d¨ªa", protestaba una mujer que no quiso dar su nombre.
Esperanza Castej¨®n P¨¦rez ya se encontraba en la ma?ana de ayer en su casa y no quiso hacer declaraciones a EL PA?S. La ¨²nica obligaci¨®n que le ha impuesto el juez de instrucci¨®n es que comparezca en el juzgado cuando sea citada para declarar.
El historial policial de La Chata es extenso. La Coordinadora de Barrios, que encabezaba el sacerdote Enrique Castro, ya denunci¨® en 1987 que la casa de Esperanza Castej¨®n era uno de los puntos de venta de droga en el distrito de Puente de Vallecas. Desde entonces, ha mantenido su supuesta actividad delictiva, aunque siempre la ha negado. En alguna ocasi¨®n ha asegurado que se dedicaba a "cuidar ni?os".
Las visitas de drogadictos a su casita de la calle del Doctor Lozano son frecuentes. Su inquilina ha adoptado todo tipo de precauciones para evitar ser sorprendida in fraganti, entre ellas, colocar rejas en los accesos al domicilio para ganar tiempo en caso de registro. Ayer la verja de entrada estaba cerrada.
La Chata de Vallecas fue detenida en septiembre de 1990 junto con su hijo adoptivo, Jos¨¦ Enrique Perr¨ªn, de 29 a?os. Entonces se le acus¨® de receptaci¨®n (adquisici¨®n de objetos a sabiendas de que son robados).
Esperanza Castej¨®n P¨¦rez form¨® parte en la d¨¦cada de los noventa de una estirpe que integraron personajes femeninos como la quinqui Dolores Olivares Navarro, tambi¨¦n apodada La Chata; Natividad Montes Vargas, La Nati, y Evarista Jim¨¦nez Navarro, conocida como La Gitana. Todas ellas fueron detenidas de forma reiterada como presuntas traficantes de sustancias estupefacientes.
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