Escenarios de distensi¨®n
La matanza contin¨²a implacable y los nacionalistas vascos se mueven, como de costumbre, en su eterno y casi imposible equilibrio. Mientras los cad¨¢veres mantienen un rescoldo de calor, una piel de cordero cubre su pellejo de lobo, pero cuando el calor abandona los cuerpos asesinados, ellos vuelven a ense?ar los dientes. No obstante, en el caso de los ¨²ltimos asesinatos ni siquiera se han molestado en utilizar la piel de ovino.Buscan con denuedo nuevos escenarios de distensi¨®n, mientras el ¨²nico escenario posible que conceden para sus adversarios es el camposanto. Me pregunto cu¨¢l ser¨¢ la anomal¨ªa que anida en su mente nacionalista, para que a la vez que se muestran hipersensibles ante cualquier agresi¨®n verbal, real o imaginaria que creen encajar, no tienen ning¨²n reparo en ocultar bajo su alfombra asesinatos, extorsiones y todo tipo de excesos verbales de sus compa?eros de viaje.
Resulta sorprendente el perspicaz an¨¢lisis que hacen de las ¨²ltimas acciones terroristas. Argumentan que dado que la pol¨ªtica policial del Estado no puede impedir dichas acciones, se ha de recurrir a otra soluci¨®n para el conflicto vasco. Ellos, sin duda, creen tener el b¨¢lsamo para todos los problemas: la soberan¨ªa. ?Pretenden hacernos olvidar que hace escasos meses los ¨¦xitos policiales eran tambi¨¦n, seg¨²n su lectura, un freno a la soluci¨®n del imaginario conflicto entre el Estado espa?ol y Euskadi? En cuanto a su soluci¨®n soberanista, creo que en su ardor melanc¨®lico han pasado por alto la opini¨®n de la mayor¨ªa de los ciudadanos vascos, salvo que ¨²nicamente consideren de tal condici¨®n a sus ac¨®litos y a los que con ellos comparten opini¨®n.- .
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.