2.500 pesetas contra la tentaci¨®n

"Es mucho menos costoso comprar un parche que mantener un d¨ªa a un interno en la prisi¨®n", destac¨® el juez decano de Madrid, Fernando Fern¨¢ndez, tras ponerse en pr¨¢ctica la iniciativa del parche antidroga el pasado junio. El ap¨®sito en cuesti¨®n cuesta alrededor de 2.500 pesetas la unidad. Es capaz de detectar, a trav¨¦s del sudor, si el recluso ha consumido drogas y, adem¨¢s, seg¨²n los expertos, supone "un freno psicol¨®gico" ante la tentaci¨®n de consumir drogas como la coca¨ªna o la hero¨ªna. El juez decano indic¨® en junio que estaba buscando financiaci¨®n para sufragar el coste de estas esponjas.

El dise?o del parche impide a su portador sustituirlo por otro virgen sin que se detecte. Cada unidad dispone de una numeraci¨®n irrepetible que los t¨¦cnicos anotar¨¢n en el expediente del interno al coloc¨¢rselo. Cualquier manipulaci¨®n sobre la cubierta del parche es f¨¢cilmente observable. Est¨¢ dise?ado para que s¨®lo se pueda utilizar una vez y, si se le inyecta alguna sustancia, cambia de color. Analizar el sudor dejado por el interno en la esponja del parche s¨®lo lleva unos d¨ªas.

El parche o esponja ha sido dise?ado para recoger muestras y metabolitos de coca¨ªna, hero¨ªna, opi¨¢ceos, cannabis, anfetaminas y fenilciclidina. En s¨ª mismo, no es un chivato del consumo de drogas, si bien su peque?a esponja pegada a la piel absorbe la sudoraci¨®n que una vez analizada detecta la presencia de los estupefacientes. Los reclusos pueden llevarlo colocado un m¨ªnimo de 24 horas y un m¨¢ximo de siete d¨ªas.

Seg¨²n el laboratorio que lo comercializa, Pharmcheck, su eficacia es m¨¢xima. A veces, superior a los an¨¢lisis de orina. "Est¨¢ documentado", dice un informe del laboratorio, "que dosis muy bajas de drogas pueden no ser detectadas en an¨¢lisis de orina".