El Ayuntamiento de Barcelona se ofrece para refundar Zeleste
El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Barcelona, Ferran Mascarell, asegur¨® ayer que el consistorio estudiar¨ªa "participar temporalmente en una sociedad nueva que no pierda dinero" para "refundar Zeleste", siempre que todas las partes implicadas -propietarios, arrendatarios, promotores y administraciones- se pongan de acuerdo. La hist¨®rica sala de conciertos, agobiada por una deuda cercana a los 200 millones de pesetas, podr¨ªa cerrar en breve.
"Creo que Zeleste continuar¨¢ si se parte de la base de un compromiso de futuro", dijo Mascarell, "que implicara tanto a los gestores como a los promotores de conciertos, las administraciones -la sala adeuda unos 130 millones de pesetas a la Seguridad Social, que ha instado al embargo del contenido de la misma- y a los propietarios del local, que han instado al desahucio de la sala por el impago de dos mensualidades. El concejal, sin embargo, se mostr¨® muy duro con los gestores de la sala y afirm¨® que la ¨²nica salida que no le parece buena es que el Ayuntamiento o la Generalitat asuman la deuda que ha abocado a Zeleste al precipicio del cierre: "No ser¨ªa justo con los responsables de otras salas que, con otras trayectorias y aforos, no pierden dinero". "No es normal ni comprensible que una sala con su volumen de actividad pierda dinero", continu¨®. Precisamente, V¨ªctor Jou, director de Zeleste y responsable de la sociedad gestora, Almog¨¤vers SA, asegur¨® ayer que el pr¨®ximo lunes pedir¨¢ las entrevistas con Mascarell y con el consejero de Cultura de la Generalitat, Jordi Vilajoana. El pasado jueves, Vilajoana se mostr¨® dispuesto a respaldar a los gestores de Zeleste para aplazar su deuda con la Seguridad Social.
Iniciativa privada
Mascarell insisti¨® en que un proyecto como el de Zeleste "puede funcionar perfectamente dentro de la iniciativa privada" sin m¨¢s intervenci¨®n p¨²blica: "En todo el mundo, el pop-rock se encuentra en manos privadas y con beneficios notables. No es precisamente un sector con problemas econ¨®micos". Sin embargo, reconoci¨®: "Es cierto que en un pa¨ªs como el nuestro hace falta un circuito m¨¢s amplio para una industria como la del pop-rock, que tiene una infraestructura m¨¢s bien escasa".Por su parte, Jou pidi¨® a las instituciones que se impliquen en la continuidad de Zeleste sin que ello suponga una subvenci¨®n directa: "No queremos subvenciones, pero s¨ª que podr¨ªan ayudarnos a que se aplace el pago de la deuda con la Seguridad Social y participar econ¨®micamente en el apartado de las infraestructuras, como han hecho con el Liceo y muchos teatros", dijo.
Por lo que respecta a la deuda con los propietarios del inmueble de Zeleste, V¨ªctor Jou reconoci¨® que se contrajo "sin pensar en las consecuencias". La propiedad est¨¢ amparada por la ley para pedir el desahucio a partir de dos impagos.
El director de Zeleste justific¨® la deuda y la achac¨® a la herencia que recibi¨® cuando retom¨® la direcci¨®n de la sala en 1995, despu¨¦s de siete a?os de gesti¨®n por parte de tres s¨ªndicos nombrados por el juzgado que declar¨® la quiebra abierta de la empresa en 1988: "Hemos tenido que arrastrar la bola que nos dej¨® la ¨¦poca de los s¨ªndicos", se excus¨® Jou. Sin embargo, quiso subrayar que la deuda contra¨ªda con los acreedores que tuvo como resultado la quiebra de 1988 "se est¨¢ venciendo".
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