El arzobispo de Pamplona pide a la poblaci¨®n que tenga "el valor" de negar cualquier apoyo a EH
Los restos mortales de la ¨²ltima v¨ªctima de ETA, el subteniente de Infanter¨ªa Francisco Casanova Vicente, asesinado a tiros el mi¨¦rcoles en Berriozar, ya descansan en Castej¨®n, la localidad tambi¨¦n navarra donde se cri¨®. Cientos de personas le rindieron all¨ª homenaje antes de dar sepultura a su f¨¦retro, cubierto por la bandera de Espa?a. Por la ma?ana, en el cuartel de Aizoain, donde Casanova estaba destinado, se celebraron las honras f¨²nebres, en las que el arzobispo de Pamplona, Fernando Sebasti¨¢n, pidi¨® a los ciudadanos que tengan "el valor y la libertad" de negar "cualquier apoyo social y pol¨ªtico" a cuantos "se resisten todav¨ªa a condenar claramente los m¨¦todos de amenaza y muerte" de ETA, en evidente alusi¨®n a EH.
Ante los familiares del fallecido, el ministro de Defensa, Federico Trillo; el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Santiago Valderas, el presidente navarro, Miguel Sanz, numerosas autoridades civiles y militares y cientos de compa?eros del subteniente y vecinos de Berriozar y Castej¨®n, el arzobispo pidi¨® a las instituciones "serenidad" y "fortaleza" para afrontar la ofensiva terrorista. Un desaf¨ªo caracterizado, seg¨²n sus palabras, por la "presencia desconcertante del odio y el crimen inexplicable, incrustados en el tejido de nuestra sociedad".El prelado agreg¨® en su homil¨ªa: "No nos van a hundir ni a intoxicar con el veneno del odio y la venganza". Para contribuir a que el final de la violencia llegue cuanto antes, Sebasti¨¢n apel¨® a las autoridades pol¨ªticas, pero tambi¨¦n a los educadores y a los medios de comunicaci¨®n, a los que pidi¨® que respeten "la verdad hist¨®rica" y defiendan "unos principios ¨¦ticos justos y firmes" ante las nuevas generaciones.
El arzobispo pidi¨® encajar "serenamente" el "golpe terrible" del terrorismo y, aunque ensalz¨® la necesidad de condenar los atentados, expresar p¨²blicamente el rechazo social al terrorismo y trabajar "unidos" contra la violencia, dej¨® entrever un cierto punto de pesimismo al a?adir que "en definitiva, tienen que ser ellos , los que utilizan la amenaza y la muerte para imponer sus pretensiones pol¨ªticas contra la libertad, los que renuncien a estos m¨¦todos inhumanos".
Tras ser velado toda la noche en la capilla ardiente instalada en la iglesia del cuartel, el f¨¦retro, cubierto con la bandera rojigualda, fue conducido al patio de armas del cuartel con honores militares. Al final de la ceremonia, Trillo coloc¨® una corona de flores ante el f¨¦retro e impuso al subteniente la Cruz del M¨¦rito Militar con Distintivo Amarillo a t¨ªtulo p¨®stumo. Despu¨¦s, entreg¨® la bandera a la viuda del militar asesinado, Rosal¨ªa Sainz Maza, con la que se fundi¨® en un emotivo abrazo.
Cuando el f¨¦retro era portado a hombros por un pelot¨®n del acuartelamiento camino del furg¨®n funerario que le trasladar¨ªa a Castej¨®n, numerosos asistentes formaron un espont¨¢neo pasillo de honor uniendo sus manos y alzando los brazos.
En Castej¨®n, el pueblo donde el subteniente Casanova, nacido en la localidad riojana de Igea, pas¨® su infancia y en el que siguen residiendo sus padres, centenares de vecinos desfilaron por la capilla ardiente que se instal¨® en el Ayuntamiento a las dos y media de la tarde. 90 minutos despu¨¦s parti¨® el ata¨²d a hombros de agentes de la Guardia Civil y acompa?ado por una multitud. Luego lleg¨® a la iglesia parroquial de San Francisco Javier, donde se celebr¨® un breve responso, y de all¨ª en coche f¨²nebre al cementerio municipal, donde fue finalmente enterrado entre decenas de coronas y ramos de flores.
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