Anfitri¨®n de la esperanza
"S¨®lo nos queda luchar"
A Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez no le hace falta viajar al Tercer Mundo para ser solidario. Con su trabajo desde M¨¢laga, este abogado de 34 a?os se ha convertido en la voz de los inmigrantes, en el defensor de sus derechos y en un cr¨ªtico s¨®lido y contundente contra la pol¨ªtica inmigratoria del PP. Fue el autor de la querella contra la Subdelegaci¨®n del Gobierno por la pol¨¦mica expulsi¨®n de los 103 subsaharianos sedados con Haloperidol y quien, en la etapa socialista, denunci¨® las p¨¦simas condiciones del centro de internamiento de Capuchinos. Desde hace tres a?os preside Andaluc¨ªa Acoge.Con tanta serenidad como firmeza, exige un pacto de Estado en materia de inmigraci¨®n, llama a la movilizaci¨®n contra el proyecto de Ley de Extranjer¨ªa y anuncia que su organizaci¨®n presionar¨¢ a las instituciones competentes para que presenten recursos de inconstitucionalidad cuando se apruebe la norma. Adem¨¢s, lanza una advertencia con vistas al futuro: los argumentos de los pol¨ªticos contra la inmigraci¨®n pueden alentar la xenofobia y ser la justificaci¨®n que buscan los violentos.
Sencillo, afable y coherente, cuenta que su vida cambi¨® una tarde de 1990 en la calle Granada. All¨ª se encontr¨® con una amiga que le cont¨® que acababa de fundarse M¨¢laga Acoge y que necesitaban abogados. Hac¨ªa poco que hab¨ªa acabado la carrera y pens¨® que pod¨ªa prestar cuatro horas de asistencia jur¨ªdica gratuita a la semana. No tard¨® en descubrir lo que ¨¦l llama su compromiso pol¨ªtico. Colabor¨® como voluntario de base, lleg¨® a la presidencia de M¨¢laga Acoge y en 1997 fue elegido para dirigir la organizaci¨®n en Andaluc¨ªa.
Dada su trayectoria, no sorprende su malestar con las afirmaciones del ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, quien justific¨® la reforma de la ley en la necesidad de dejarse de buenos sentimientos y ser realistas frente al fen¨®meno de la inmigraci¨®n. "Un ministro no puede permitirse el lujo de decir esas barbaridades, porque lo ¨²nico que puede provocar es un sentimiento de rechazo hacia el inmigrante y hacer mella en la convivencia pac¨ªfica. Los pol¨ªticos tienen que ser responsables porque sus palabras pueden ser malinterpretadas o utilizadas por los violentos, que pueden encontrar la justificaci¨®n a su conducta en esos argumentos demag¨®gicos".
Cree que es necesario "el consenso de todas las fuerzas pol¨ªticas y de la sociedad civil para que el tema no sea un arma arrojadiza ni se use electoralmente". Y a?ade: "?ste es un tema que m¨¢s bien quita votos, por eso nadie quiere enarbolar los derechos de los inmigrantes porque pueden salir escaldados. Pero tampoco es l¨ªcito que usen esa bandera para ganarlos. De ah¨ª la necesidad de un pacto de Estado donde todos tengamos que renunciar a planteamientos para que el ¨²nico que salga ganando sea el inmigrante".
Para el presidente de Andaluc¨ªa Acoge, "si la parte m¨¢s poderosa no asume esa propuesta de pacto, a los dem¨¢s no nos queda m¨¢s que luchar con u?as y dientes frente al avasallamiento de los derechos de estas personas". En este argumento fundamenta Rodr¨ªguez su llamamiento a la movilizaci¨®n contra el proyecto de ley. "Tenemos que oponernos con los instrumentos jur¨ªdicos a nuestro alcance, pero tambi¨¦n hay que salir a la calle a protestar. Es una batalla perdida, pero m¨¢s vale morir de pie que vivir arrodillado".En este frente, anuncia que tan pronto como se apruebe la ley, Andaluc¨ªa Acoge instar¨¢ a los grupos parlamentarios y al Defensor del Pueblo a presentar recursos de inconstitucionalidad. Como abogado justifica esta decisi¨®n en que la reforma no s¨®lo discrimina entre inmigrantes legales e ilegales, sino tambi¨¦n seg¨²n su capacidad econ¨®mica al negar el derecho a justicia gratuita. "Un ilegal rico se podr¨¢ ir a un abogado, pero el pobre no", critica.
Rodr¨ªguez rechaza que la actual Ley de Extranjer¨ªa haya tenido un efecto llamada sobre los inmigrantes. En su opini¨®n, el incremento de pateras obedece al proceso de regularizaci¨®n y al cierre de la frontera de Ceuta y Melilla, que ha desviado los flujos migratorios hacia Canarias y el Estrecho. "Estoy convencido que esos inmigrantes no se han le¨ªdo la ley ni saben qu¨¦ derechos les reconoce. Si la justificaci¨®n del Gobierno para la reforma es frenar las pateras, va a llevarse un estrepitoso fracaso".
No cree que haya que endurecer las penas contra las mafias que introducen inmigrantes, aunque s¨ª reclama a las administraciones m¨¢s medios para la lucha contra ese tr¨¢fico humano y protecci¨®n social para los testigos que colaboran en su desarticulaci¨®n. A los miles de personas que colaboran con ONGs les pide que no se limiten al trabajo voluntario y que den un paso m¨¢s, que adopten un posicionamiento pol¨ªtico coherente y voten a aquellas opciones que defiendan los derechos humanos de los inmigrantes. Rodr¨ªguez hace una reflexi¨®n: "Es un drama humano. No podemos acostumbrarnos a los ahogados en el Estrecho.Tenemos que poner nuestro empe?o para que no ocurra. Somos peque?itos, pero intentaremos poner nuestro granito de arena a trav¨¦s de la sensibilizaci¨®n y la denuncia permanentes".
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