"Un aut¨¦ntico cebo"
"Un aut¨¦ntico cebo para ETA". Esta frase la dec¨ªa ayer un guardia civil a medida que acordonaba la zona, junto al cuartel, en la que se hab¨ªa producido su criminal atentado. La suya era una expresi¨®n dolida; escueta, pero seca y cargada de intenci¨®n. Y sab¨ªa que se la estaba diciendo a los periodistas. El agente no quer¨ªa ser expl¨ªcito. Pero s¨ª, muchas personas, entre ellas algunos de los propios guardias llegados desde Huesca y Zaragoza, se preguntaban c¨®mo era posible que se hubiera dejado a la banda terrorista una presa tan f¨¢cil en una localidad, Sallent de G¨¢llego, en la que ya se hab¨ªa producido un atentado, el 9 de agosto de 1997, y que se halla en la ruta que utiliza para internarse en Espa?a desde Francia: la frontera, por el puerto de El Portalet, est¨¢ a apenas 12 kil¨®metros de distancia y carece de vigilancia regular.
La bomba lapa en el veh¨ªculo de los guardias podr¨ªa haber sido colocada con suma facilidad en cualquier momento de la noche.
"Lo normal es que lo hayan hecho con tiempo suficiente como para estar lejos en el instante de la explosi¨®n", razonaba el diputado socialista Juan Alberto Belloch, ex ministro de Justicia e Interior, que lleg¨® a Sallent poco despu¨¦s del mediod¨ªa acompa?ando al presidente de la comunidad, su compa?ero de partido Marcelino Iglesias.
Puesto que los dos agentes hab¨ªan fallecido y no hab¨ªa ning¨²n testigo de lo ocurrido en los instantes previos a la explosi¨®n, resultaba embarazoso preguntar si se hab¨ªan adoptado suficientes medidas de seguridad.
El ¨²nico que pod¨ªa contestar a esa cuestion, el director general de la Guardia Civil, Santiago L¨®pez Valdivielso, lleg¨® a las dos y media de la tarde y no respondi¨® a ella. Eso s¨ª, explic¨® que en todos los cuarteles se han de adoptar unas normas preventivas que se clasifican en tres niveles, seg¨²n el grado de alerta que rija en cada lugar. En Sallent, precis¨®, rige la m¨¢xima, pero no concret¨® las medidas que deben tomarse y si se hab¨ªan seguido en este caso.
No era dif¨ªcil ayer o¨ªr voces de agravio. Hace diez a?os que el Ayuntamiento de la localidad oscense ofreci¨® a la Guardia Civil un terreno para construir una nueva casa cuartel e incluso le regal¨® los cimientos. Pero las obras se han interrumpido varias veces, una coincidiendo con el esc¨¢ndalo Rold¨¢n. Ahora hace muy poco que se ha desbloqueado el largo expediente y se ha adjudicado la terminaci¨®n de los trabajos.
"Si hubieran tenido esa casa cuartel, esto no habr¨ªa sucedido", comentaba un agente forestal.
En cualquier caso, no pod¨ªa saberse si las v¨ªctimas hab¨ªan tomado alguna precauci¨®n, ni siquiera si llegaron a poner su coche en marcha.
Los restos del autom¨®vil quedaron esparcidos por toda la plaza pese a que las dos paredes del antiguo front¨®n sirvieron para amortiguar el impacto.
Tres turismos aparcados cerca resultaron da?ados. Uno de ellos, con matr¨ªcula de Zaragoza, result¨® sospechoso y se comprob¨® que figuraba en los archivos como robado en alguna ocasi¨®n, pero no constaba la fecha exacta.
As¨ª, ante la posibilidad de que se tratara de un coche bomba instalado all¨ª como una trampa para provocar un segundo atentado de mayores dimensiones, se procedi¨® a su voladura controlada. Result¨® ser el veh¨ªculo de un turista que tiempo atr¨¢s hab¨ªa denunciado efectivamente su robo.
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