Integraci¨®n y educaci¨®n ambiental

La mayor¨ªa de la oferta de ocio a la que pueden optar los j¨®venes andaluces en verano dificulta el acceso a los que tienen alguna minusval¨ªa. No es el caso del aula de la naturaleza Ca?ada de las Hazadillas de Ja¨¦n, donde monitores y alumnos sin o con alguna discapacidad conviven en un clima en el que se fomentan la solidaridad. Se trata de una instalaci¨®n gestionada por el Centro Especial de Empleo del Ayuntamiento jiennense, un ¨®rgano cuya raz¨®n de ser es la integraci¨®n e inserci¨®n laboral de los minusv¨¢lidos a trav¨¦s de las actividades medioambientales.El aula de la naturaleza se ubica en pleno parque periurbano del mismo nombre. Son casi 3.000 hect¨¢reas de alto valor ecol¨®gico a escasos 20 kil¨®metros de la capital jiennense. Sus modernas instalaciones, con dormitorios, comedor y salas multiusos, se ofertan a escolares y grupos de distintos colectivos que quieran saborear por unos d¨ªas el placer de convivir con la naturaleza en estado puro.

All¨ª van a permanecer durante esta semana 30 j¨®venes de la Asociaci¨®n de Sordos de Ja¨¦n. Guiados por un grupo de monitores medioambientales, algunos de los cuales con minusval¨ªas f¨ªsicas, emplean la jornada en distintas de actividades medioambientales, que van desde crear su propio huerto, el dise?o de t¨¦cnicas de orientaci¨®n de rutas, aprender a diferenciar la diversidad de flora y fauna del parque periurbano o la pr¨¢ctica de deportes de naturaleza, como la escalada o la bicicleta de monta?a. "El aula permite a todos los j¨®venes que llegan del medio urbano desarrollar en la pr¨¢ctica lo que hasta ahora s¨®lo hab¨ªan le¨ªdo en los libros", manifiesta Diego Garc¨ªa, gerente de este centro que ya ha acogido en lo que va de verano a varios turnos de j¨®venes.

El aula de la naturaleza de la Ca?ada de las Hazadillas es un eslab¨®n m¨¢s del Centro Especial de Empleo, un ¨®rgano aut¨®nomo del Ayuntamiento de Ja¨¦n que asume toda la gesti¨®n medioambiental de la capital. De sus 80 trabajadores, m¨¢s de 60 sufren alguna minusval¨ªa superior al 33%. Todos han encontrado en las actividades de jardiner¨ªa y educaci¨®n ambiental una f¨®rmula ideal para su inserci¨®n laboral en un mundo cada vez con m¨¢s barreras. Los trabajadores de este centro no s¨®lo cuidan con esmero todas las zonas verdes de la capital jiennense, sino que se han transformado en los mejores profesores de los m¨¢s de 1.500 escolares que han desfilado desde el mes de marzo por el aula urbana creada para colaborar con los centros educativos en la formaci¨®n medioambiental de los j¨®venes.

El Centro Especial de Empleo es, a juicio de su gerente, un ¨®rgano pionero en Espa?a en este tipo de integraci¨®n laboral. Cuando se constituy¨® hace tres a?os empez¨® con un presupuesto de 135 millones, una cantidad que ya se ha cuatriplicado. A los trabajadores, con o sin minusval¨ªa, se les aplica el convenio colectivo del Ayuntamiento. El vivero creado en el centro sirve para repoblar todas las zonas verdes de la capital. En el ¨²ltimo a?o se estima que se han plantado m¨¢s de 40.000 plantas, y especialmente rese?able result¨® la campa?a de aprovechamiento de los envases de tetrabrik en maceteros. "Llegaron a traernos m¨¢s de 8.000 envases", subraya Diego Garc¨ªa.

La rutina del Centro Especial de Empleo ha encontrado en verano una magn¨ªfica v¨¢lvula de escape en el aula de la naturaleza de la Ca?ada de las Hazadillas. Cuando abandonen sus instalaciones los miembros de la Asociaci¨®n de Sordos vendr¨¢n otros grupos ¨¢vidos de tocar la naturaleza con sus propias manos. Pero lo m¨¢s importante es que aqu¨ª conviven sin ninguna barrera f¨ªsica o social personas con o sin minusval¨ªas.

Manuel Garc¨ªa, Jos¨¦ Enrique Carrillo, Inmaculada Mart¨ªn, Jos¨¦ Luis Berrio y Arturo S¨¢nchez son los monitores encargados de que la estancia de los alumnos en el aula se desarrolle sin complejos. No s¨®lo son buenos conocedores de la naturaleza, sino que se han tenido que especializar en actividades de ocio y tiempo libre y, sobre todo, son buenos psic¨®logos para ser capaces de detectar cu¨¢ndo un alumno necesita un plus de ayuda al del resto de j¨®venes. En esta ocasi¨®n, han tenido incluso que aprender a comunicarse con el lenguaje de los sordos.

El equipo de monitores se siente tambi¨¦n orgulloso de contribuir a sensibilizar a los jiennenses para que respeten un patrimonio natural cada vez m¨¢s amenazado por el boom urban¨ªstico. All¨ª, en pleno pulm¨®n verde de Ja¨¦n, discurre un verano diferente, y mucho m¨¢s placentero, al que emerge del cemento de la ciudad.