Los alcaldes del Campo de Gibraltar se quejan del silencio oficial sobre el submarino nuclear
El Campo de Gibraltar se siente abandonado a su suerte por el Gobierno central con respecto a la reparaci¨®n del submarino nuclear brit¨¢nico atracado desde hace m¨¢s de tres meses en el puerto del Pe?¨®n. Los alcaldes de La L¨ªnea y Algeciras aseguran que el Ejecutivo central no se ha puesto en contacto con ellos para explicarles la situaci¨®n y lamentan la escasa capacidad de maniobra de las autoridades espa?olas, que van a remolque de las versiones brit¨¢nicas y no han previsto medidas de emergencia para las cerca de 250.000 personas a las que podr¨ªa afectar un hipot¨¦tico accidente.
Informaci¨®n fallida
Desde la oficina del ministro Portavoz en el palacio de La Moncloa se aseguraba ayer que el Gobierno espa?ol "est¨¢ informado puntualmente" de todo lo referente al escape en el sistema de refrigeraci¨®n del reactor nuclear del Tireless, que se aver¨ªo el 12 de mayo cerca de Sicilia y que lleva atracado en Gibraltar desde una semana despu¨¦s.El Gobierno asegura que el contacto diplom¨¢tico es continuo y que asume las explicaciones del Ejecutivo brit¨¢nico, que considera m¨¢s seguro reparar el submarino en la colonia que traslarlo hasta el Reino Unido.
En los municipios del Campo de Gibraltar se ven las cosas de muy distinta manera: se lamenta que en ning¨²n momento haya habido contactos oficiales para conocer qu¨¦ es lo que est¨¢ pasando con el sumergible nuclear y a qu¨¦ riesgos podr¨ªan llegar a enfrentarse. "Los ¨²nicos que nos han dicho algo son los del Consejo de Seguridad Nuclear y porque se lo ped¨ª yo", afirma rotundo el alcalde Algeciras, Patricio Gonz¨¢lez, del Partido Andalucista. El CSN y las unidades especializadas de la Armada han medido el nivel de radioactividad en el agua y aseguran que no hay contaminaci¨®n.
Pero estos datos positivos sobre el mar no calman a los habitantes de la zona, ya que los trabajos de reparaci¨®n del escape se producir¨ªan muy cerca del reactor nuclear y cualquier accidente podr¨ªa liberar radiactividad a la atm¨®sfera y, en una zona tan azotada por los vientos, cientos de miles de personas podr¨ªan verse afectadas.
Las autoridades locales, sin noticias del Gobierno, est¨¢n estudiando la posibilidad de llevar el asunto a los tribunales europeos. El alcalde de La L¨ªnea, Juan Carlos Ju¨¢rez, del GIL, ha remitido un carta al primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, pidi¨¦ndole que traslade al Tireless a una de sus bases especializadas, en Devonport o Faslane.
El Gobierno insist¨ªa ayer en la fluidez del contacto con los brit¨¢nicos, pero esta informaci¨®n a veces ha brillado por su ausencia, como cuando el ministro Portavoz, P¨ªo Cabanillas, asegur¨® el 11 de julio que la reparaci¨®n del submarino se estaba efectuando "con toda normalidad". M¨¢s de dos meses despu¨¦s, a¨²n no ha comenzado.En el Campo de Gibraltar este tipo de situaciones producen una mezcla de escalofr¨ªo e irritaci¨®n, pues contrasta la actitud decidida del Gobierno gibraltare?o. Peter Caruana consigui¨® el pasado viernes paralizar la reparaci¨®n, que estaba previsto que comenzara el lunes, y ha forzado una serie de reuniones en Londres, donde el Ministerio de Defensa brit¨¢nico ofrecer¨¢ informaci¨®n a una terna de expertos independientes seleccionada por el Ejecutivo gibraltare?o.
Dichos expertos elaborar¨¢n un informe sobre las garant¨ªas de seguridad que ofrece la reparaci¨®n del submarino en las instalaciones del Pe?¨®n. Se calcula que la reparaci¨®n durar¨¢ cerca de dos meses y que en la misma intervendr¨¢n unos 60 expertos.
Espa?a va a remolque en esto tambi¨¦n y desde Moncloa aseguraban ayer que est¨¢n esperando el fin de estas negociaciones entre la colonia y su metr¨®poli -que deben reanudarse hoy tras la primera reuni¨®n del lunes- para tener acceso al informe de seguridad brit¨¢nico.
Los alcaldes de Algeciras y La L¨ªnea se preguntan c¨®mo una comunidad tan peque?a como Gibraltar, con s¨®lo 30.000 habitantes, puede parar la maquinaria del Ministerio de Defensa brit¨¢nico; mientras que las autoridades espa?olas se limitan a dar por buena la versi¨®n brit¨¢nica, ignorando incluso cu¨¢ndo se iniciar¨¢n las reparaciones, y mantiene en ayunas de cualquier informaci¨®n a la poblaci¨®n espa?ola, formada por un cuarto de mill¨®n de personas.
La inquietud entre la poblaci¨®n ha ido aumentando a medida que se prolongaba la presencia del sumergible. Cuando lleg¨® el submarino, el pasado 19 de mayo, el Gobierno dijo que s¨®lo permanecer¨ªa a en Gibraltar el tiempo indispensable para su traslado al Reino Unido.
El pasado 13 de julio, unas 3.000 personas se manifestaron a ambos lados de la verja para exigir su salida de la colonia.
El Gobierno reconoce que no han existido contactos con las autoridades locales y que tampoco hay un plan de emergencia espec¨ªfico para el caso de que se produzca un accidente.
Ayer mismo, el diputado socialista por C¨¢diz Salvador de la Encina anunci¨® que, en la primera sesi¨®n de control en el Congreso, el pr¨®ximo 13 de septiembre, pedir¨¢ explicaciones al ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqu¨¦, o al propio presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, ya que a su juicio se ha producido una "dejaci¨®n de funciones" por parte del Gobierno en este asunto.
Una aver¨ªa no tan frecuente
El comandante de las Fuerzas Brit¨¢nicas en Gibraltar, el comodoro Andrew Willmett, aseguraba la semana pasada que ya se hab¨ªa actuado en numerosas ocasiones en ca?er¨ªas de refrigerante de reactores nucleares. En la mayor¨ªa de los casos, se trataba de tuber¨ªas conectadas a aparatos de medici¨®n y se actu¨® para sustituir estos medidores. La grieta de dos mil¨ªmetros en el circuito del Tireless no es algo frecuente, m¨¢s bien es casi novedoso.El circuito primario cumple una doble misi¨®n, por una lado refrigera el reactor nuclear y por otro traslada ese calor al circuito secundario que por vapor mover¨¢ las dos turbinas el¨¦ctricas de las h¨¦lices. El agua de este primer circuito est¨¢ a muy alta presi¨®n, por lo que se escapa a toda velocidad por una fuga. Este refrigerante cae entonces en el interior del escudo de aislamiento, muy cerca del reactor, de ah¨ª el peligro de fuga radioactiva en caso de que algo vaya mal en la reparaci¨®n.
Desde que se produjo el accidente del Tireless, el reactor est¨¢ apagado y durante estos tres meses se ha esperado a que se enfr¨ªe (su actividad nunca cesa totalmente) para dejar el nivel de refrigerante por debajo de la fisura y sustituir el tubo da?ado.
Ese agua se almacenar¨¢ en unos dep¨®sitos para residuos radiactivos, de los que posteriormente pasar¨¢ a vasijas m¨¢s peque?as que ser¨¢n trasladadas a Gran Breta?a a bordo del buque de intendencia Fort Rosalie.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.