Fox propone a Clinton la libre circulaci¨®n de personas entre Estados Unidos y M¨¦xico

El presidente electo de M¨¦xico, Vicente Fox, recibi¨® ayer una bienvenida de lujo en Washington, donde se entrevist¨® por separado con Bill Clinton y con su delf¨ªn, Al Gore. Fox, que hoy se reunir¨¢ en Dallas con George Bush, predic¨® su idea de establecer una m¨¢xima apertura para los movimientos de personas y mercanc¨ªas entre los tres pa¨ªses norteamericanos signatarios del Tratado de Libre Comercio (TLC): EE UU, M¨¦xico y Canad¨¢.Pero si la acogida a Fox, cuya victoria en las pasadas elecciones presidenciales fue aplaudida en Estados Unidos como la gran prueba de la democratizaci¨®n de M¨¦xico, fue de la m¨¢xima calidez, su idea de que los pa¨ªses del TLC sigan el ejemplo de libertad de movimientos de la Uni¨®n Europea fue acogida con ciertas reticencias. Las empresas y los sindicatos estadounidenses, cuyos fondos son decisivos en la actual batalla por la Casa Blanca, ya han hecho constar su temor a que la pr¨¢ctica abolici¨®n de fronteras que propone Fox se traduzca en el cruce del r¨ªo Grande de millones de inmigrantes mexicanos adicionales.

Clinton, no obstante, escuch¨® con atenci¨®n en el Despacho Oval a Fox, que tomar¨¢ posesi¨®n en diciembre, un mes antes de que el pol¨ªtico de Arkansas ceda la Casa Blanca a su correligionario Gore o al republicano Bush. "El diablo", dijo Clinton, "siempre est¨¢ en los detalles, as¨ª que quiero hablar con ¨¦l [Fox] y ver qu¨¦ es lo que tiene en mente".

Al menos en el ¨¢mbito ret¨®rico, Gore tampoco dio un portazo a las propuestas de Fox, al que calific¨® como "un hombre con grandes ideas", para transformar las relaciones entre los pa¨ªses norteamericanos. El candidato dem¨®crata a la Casa Blanca, que recibi¨® al l¨ªder mexicano en su residencia oficial de vicepresidente de EE UU, se declar¨®, sin dar m¨¢s detalles, a favor de la creaci¨®n de "una comunidad democr¨¢tica en Am¨¦rica del Norte".

Antes de viajar a Estados Unidos, Fox hab¨ªa estado en Canad¨¢, donde tambi¨¦n le expuso al primer ministro, Jean Chr¨¦tien, su objetivo de avanzar en la integraci¨®n de Am¨¦rica del Norte seg¨²n el modelo de la Uni¨®n Europea, cuyos miembros aplican una amplia libertad de movimientos de personas, mercanc¨ªas y capitales. La respuesta de Chr¨¦tien fue muy negativa. "No podemos establecer entre Canad¨¢, EE UU y M¨¦xico el mismo tipo de relaciones existente en Europa", manifest¨®.

El primer ministro canadiense se agarr¨® a la idea de que Canad¨¢ no desea compartir con sus vecinos del sur, estadounidenses o mexicanos, una divisa com¨²n, como lo es el euro. Fox le respondi¨® que su objetivo es "promover la prosperidad en Am¨¦rica del Norte", sea cual sea el mecanismo.

"No estoy proponiendo", dijo el presidente electo mexicano, "que adoptemos una divisa com¨²n. Creo que no funcionar¨ªa. Lo que propongo es que trabajemos juntos a favor del desarrollo humano y del desarrollo econ¨®mico, que reduzcamos las diferencias".