La Comunidad rechaza el primer parque e¨®lico de la regi¨®n por la presencia de aves

La Consejer¨ªa de Medio Ambiente de la Comunidad ha emitido un informe desfavorable sobre el proyecto de instalaci¨®n de un parque e¨®lico en Santa Mar¨ªa de la Alameda, el pueblo m¨¢s alto de la regi¨®n -1.420 metros-, que linda con las provincias de ?vila y Segovia. La negativa se produce despu¨¦s de que la Junta de Castilla y Le¨®n, a la que se consult¨®, advirtiera de la existencia en la zona de una colonia de ¨¢guilas imperiales, especie protegida por la Uni¨®n Europea. Este parque, impulsado por la empresa Altos del Voltoya, iba a ser el primero de este tipo en la regi¨®n.

Los documentos, emitidos por los Servicios Territoriales de Medio Ambiente de ?vila y Segovia, dejan claro que la ubicaci¨®n del parque e¨®lico en Santa Mar¨ªa de la Alameda es "incompatible" con la existencia de una colonia de ¨¢guilas imperiales situada a menos de dos mil metros del lugar elegido para su construcci¨®n. Adem¨¢s, indican que por la zona vuelan habitualmente cig¨¹e?as negras y grullas, circunstancia ¨¦sta que desaconsejaba tambi¨¦n su instalaci¨®n. Los cables a¨¦reos que transmiten la energ¨ªa y las aspas de los molinos podr¨ªan matar a las aves. Ambas comunidades aut¨®nomas forman parte del proyecto Life de la Uni¨®n Europea, que est¨¢ espec¨ªficamente dirigido a preservar el ¨¢guila imperial ib¨¦rica, especie que se encuentra en peligro de extinci¨®n.Para confeccionar la evaluaci¨®n de impacto ambiental, la Comunidad de Madrid recab¨® informes de "impacto transfronterizo" a la Junta de Castilla y Le¨®n. La solicitud se present¨® el 16 de diciembre de 1999 y la contestaci¨®n lleg¨® el 2 de febrero pasado a la sede de la Consejer¨ªa de Medio Ambiente madrile?a.

El pasado viernes, el director general de Calidad y Evaluaci¨®n Ambiental de la Comunidad de Madrid, Ignacio L¨®pez Galiacho, apunt¨® otras causas que propiciaron que Medio Ambiente rechace la instalaci¨®n. Una de ellas es que en el proyecto de construcci¨®n del parque "no estuvieran previstos otros lugares para su posible ubicaci¨®n". "No me indicaban otro lugar que no fuera la Dehesa de la Cepera, en Santa Mar¨ªa de la Alameda", se?ala L¨®pez Galiacho. Adem¨¢s, los cables encargados de transportar la energ¨ªa proveniente de los vientos hasta la central, que la transformar¨ªa en energ¨ªa el¨¦ctrica, invad¨ªan una zona de especial protecci¨®n para las aves de Castilla y Le¨®n.

El director general justific¨® la petici¨®n de " impacto transfronterizo" a Castilla y Le¨®n en que las ¨¢guilas imperiales "no entienden de divisiones administrativas". Tambi¨¦n apunt¨® que se trata de una de las colonias "m¨¢s importantes del Sistema Central y de Madrid". L¨®pez Galicho considera que s¨®lo el Consejo de Gobierno de la regi¨®n, apelando al " inter¨¦s general", podr¨ªa conseguir que el parque se construya en ese lugar.

La decisi¨®n de no conceder el permiso para instalar el parque e¨®lico ha supuesto un rev¨¦s a las empresas que ten¨ªan previsto financiar y explotar el proyecto: Caja Madrid, Uni¨®n Fenosa, Iberpistas, Sinae Energ¨ªa y Medio Ambiente, la empresa p¨²blica Aval Madrid y un grupo formado por todas las cajas de ahorro de Castilla y Le¨®n, llamada Sodical. Todas ellas constituyeron la empresa de Parques E¨®licos Altos del Voltoya con la intenci¨®n de construir otras cinco instalaciones similares al de Santa Mar¨ªa de la Alameda, en las localidades abulenses de Ojos Albos, Aldeavieja y Urraca Miguel, y en las segovianas de Villacast¨ªn y El Espinar. Para estos proyecto se contaba con una inversi¨®n pr¨®xima a los 16.000 millones de pesetas, de los cuales 2.500 millones ir¨ªan destinados al parque de Santa Mar¨ªa de la Alameda.

Altos del Voltoya contaba con el apoyo de la Confederaci¨®n Empresarial Independiente de Madrid (CEIM) y de la Consejer¨ªa de Econom¨ªa de la Comunidad de Madrid, a trav¨¦s de la empresa Capital Riesgo, que participaba en el proyecto con un 7% del capital.

Los t¨¦cnicos de Altos del Voltoya estuvieron durante un a?o elaborando una "auditor¨ªa del viento" en la dehesa de La Cepeda, lugar donde se iba a construir el parque. Su intenci¨®n era comprobar la velocidad y densidad de los aires de la zona. El diagn¨®stico fue satisfactorio.

En Santa Mar¨ªa de la Alameda los vientos circulan a una velocidad media anual de 7,6 metros por segundo, equivalente a unos 28 kil¨®metros por hora. La densidad es de 1,05 kilos por metro c¨²bico, seg¨²n los expertos. Estos valores, seg¨²n el personal t¨¦cnico de la empresa, eran "satisfactorios" para instalar el parque. Con los 22 molinos aerogeneradores de 45 metros de altura y unas aspas de 44 metros de di¨¢metro se podr¨ªan conseguir 36.343 megavatios por hora al a?o, una potencia, sin embargo, muy por debajo de la energ¨ªa que genera una central nuclear como la de Vandell¨®s II, que multiplica estas cifras 220 veces. En contra de lo ocurrido con el parque de Santa Mar¨ªa, la empresa Altos del Voltoya s¨ª ha conseguido las licencias para el resto del proyecto. Fuentes de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y Le¨®n confirmaron ayer que todos los parques radicados en ?vila "est¨¢n operativos" y los dos de Segovia "contin¨²an los tr¨¢mites administrativos".

La alcaldesa de Santa Mar¨ªa de la Alameda, Mar¨ªa Bego?a Garc¨ªa Mart¨ªn (PP), estaba a favor del proyecto siempre que los aerogeneradores no se repartieran por el pueblo. Garc¨ªa Mart¨ªn ha lamentado la negativa de la Comunidad.

El pueblo se podr¨ªa haber embolsado una buena cantidad de dinero procedente de las licencias de obras, lo que le hubiera permitido aumentar los 62 millones de presupuesto con los que cuenta. La alcaldesa esperaba cobrar, seg¨²n las ordenanzas municipales, el 2% de los 2.500 millones de la inversi¨®n, en total unos 50 millones de pesetas que se sumar¨ªan a estos 62 del presupuesto.

Mar¨ªa Bego?a Garc¨ªa, adem¨¢s, estaba convencida de que la empresa iba a construir una especie de "ruta del viento", una senda ecol¨®gica por los montes de la comarca para explicar a los curiosos las caracter¨ªsticas de los aires, las corrientes y los lugares de inter¨¦s de la zona.