"Es dif¨ªcil vender pan y golosinas con un escolta en la puerta"

"Es triste pero cierto que en el Pa¨ªs Vasco quienes no somos nacionalistas tenemos que vivir enjaulados para que no nos maten", dec¨ªa ayer la edil donostiarra Mar¨ªa Jos¨¦ Usandizaga ante el cad¨¢ver de su compa?ero.Manuel Indiano tuvo vigilancia privada, asignada por el PP, pero al poco tiempo renunci¨® a ella porque deseaba realizar una vida normal.

El concejal fue recriminado muchas veces por la direcci¨®n de su partido por su "actitud imprudente" ante la ofensiva etarra. "Era un objetivo f¨¢cil", apunt¨® ayer una dirigente, porque "hac¨ªa una vida rutinaria y no ten¨ªa ning¨²n tipo de protecci¨®n".

Indiano no quer¨ªa que su existencia diaria fuese como la de Valeriano Mart¨ªnez, el otro concejal del PP en Zum¨¢rraga, que vive protegido casi desde que lleg¨® la democracia. Lleva 27 a?os dedicado a la pol¨ªtica. Primero, cuando militaba en la extinta UCD, le escoltaban guardias civiles. Ahora lo hacen dos ertzainas.

"Manuel se sent¨ªa amenazado y ten¨ªa miedo", admite Mart¨ªnez. "Yo le re?¨ª en varias ocasiones y le dije que era un poco lanzado porque los toros vienen muy fuertes [aludiendo a la espiral de asesinatos de ETA]. Sin embargo, es dif¨ªcil vender pan y golosinas con un escolta en la puerta", asevera su compa?ero de formaci¨®n.

Adem¨¢s de recomendarle insistentemente que llevara escolta, el PP comunic¨® a Indiano, como al resto de sus concejales, que durante el verano abandonara Euskadi como medida de seguridad. Sin embargo, ¨¦l prefiri¨® quedarse en Zum¨¢rraga para regentar su negocio.