Inundaciones, sequ¨ªas y miles de muertos

Los campesinos peruanos conocen sus efectos desde hace siglos: con intervalos de dos a siete a?os, el clima cambia, y tras una sequ¨ªa extrema, en primavera llegan inundaciones y lluvias prolongadas en diciembre. Por eso, porque aparece con la Navidad, los conquistadores llamaron al fen¨®meno El Ni?o. La ¨²ltima vez que apareci¨® El Ni?o, en el invierno de 1997, las lluvias causaron casi 200 muertos y 15.000 damnificados en Per¨². Al otro extremo del Pac¨ªfico, Filipinas sufri¨® durante meses una sequ¨ªa. El proceso fue tan agudo que hasta las aguas del Canal de Panam¨¢ bajaron, y 1.500 buques tuvieron que dar la vuelta al continente americano, incapaces de cruzar por el istmo.

Pero la peor visita de El Ni?o que se recuerda este siglo es la de 1990, cuando primero se perdi¨® el 80% de las cosechas de Per¨² por la sequ¨ªa, y despu¨¦s, las inundaciones ocasionaron 1.500 muertos y da?os por 120.000 millones de pesetas de la ¨¦poca.

Tambi¨¦n fue malo el fen¨®meno en 1992, cuando se ali¨® con la explosi¨®n del volc¨¢n de Pinatubo, en Filipinas, para producir una alteraci¨®n en el clima que, seg¨²n los expertos, afect¨® a todo el planeta. Otros a?os en que El Ni?o dej¨® notar sus efectos fueron 1978, 1980, 1983 y 1994-1995.