Espa?a sale del l¨ªo con dos golazos
Gerard y Etxeberria derribaron la resistencia de Bosnia, que no mereci¨® la derrota
Apuntada al resultadismo, la selecci¨®n espa?ola resolvi¨® con goles un partido que mereci¨® perder por juego. Desorientado, indefinido y fuera de forma, el colectivo de Camacho pas¨® por Sarajevo como un equipo menor, falto de f¨²tbol, extra?ando el partido, por el d¨ªa y el mes. A falta de juego, el marcador puede servirle s¨®lo para ganar tiempo. Por encima de cualquier otra cosa, fue una selecci¨®n efectiva: enchuf¨® pr¨¢cticamente todo cuanto gener¨®. Hay que aguardar a que comience la Liga, recuperar futbolistas y definir el ideario.Pese al ruido que provoc¨® el enunciado de la alineaci¨®n espa?ola, sobre todo por novedosa, hubo un largo silencio en la cancha. El equipo se mostr¨® aturdido, falto de determinaci¨®n en todas las l¨ªneas, en manifiesta inferioridad t¨¢ctica respecto a Bosnia.
BOSNIA 1-ESPA?A 2
Bosnia: Guso; Hujdurovic, Mujcin (Topic, m. 79), Hibic, Varesanovic; Salihamidzic, Sabic, Akrapovic, Barbarez; Bolic y Baljic.Espa?a: Casillas; Manuel Pablo, Abelardo, Paco, Sergi; Gerard (Julen Guerrero, m. 84), Mendieta, Helguera, Munitis (Etxeberria, m. 58); Ra¨²l y Urzaiz (Celades, m. 69). Goles: 0-1, m. 39. Mendieta, desde la banda derecha, da un pase a Gerard que, en el ¨¢rea, se hace un autopase con el tal¨®n izquierdo y empalma a la red con la derecha. 1-1, m. 42. Bolic saca una falta desde la derecha y Baljic, aprovecha un despiste de la defensa espa?ola, y marca. 1-2, m. 71. Etxeberria empalma un bal¨®n que describe una par¨¢bola hasta la red. ?rbitro: Fandel (Alemania). Amonest¨® a Salihamidzic, Helguera, Sergi, Paco y Baljic. Casi lleno -40.000 espectadores- en el estadio ol¨ªmpico de Kosevo.
La entrada de Manuel Pablo y Gerard no resolvi¨® los problemas estructurales del colectivo de Camacho, mal puesto y bajo de ¨¢nimo. Baljic entr¨® por la banda izquierda en cada arranque local, tanto como Salihamidzic por el carril derecho, mientras que Gerard estuvo tan certero en la llegada, como perdido en la elaboraci¨®n del juego, pues el barcelonista nunca fue un armador.
Bosnia manej¨® el ritmo de juego como si fuera una selecci¨®n adulta. Tuvo una buena disciplina defensiva, anduvo r¨¢pida en las transiciones y entr¨® siempre por los costados, como si hubiera jugado toda la vida con dos extremos, desequilibrando los laterales espa?oles y sometiendo a un gran esfuerzo a los centrales y a Casillas.
Defendi¨® mal el equipo espa?ol, le tomaron la espalda con reiteraci¨®n y tuvo que recurrir a la falta continua, bordeando siempre el penalti -le reclamaron hasta tres-, a punto de encajar el gol en cada jugada, hasta que lleg¨® a la salida de un golpe franco que se comieron todos los espa?oles, desde los que estaban en la barrera, hasta el portero, muy tapado.
Faltos de organizaci¨®n y de automatismos de juego, los espa?oles salieron mal parados en cualquier comparaci¨®n con Bosnia. El plantel de Camacho no supo siquiera administrar el tanto de Gerard, un gol de una ejecuci¨®n impecable, digna de un futbolista que sabe acompa?ar siempre la jugada para resolverla de la mejor manera. Mendieta le meti¨® la pelota por la banda derecha y el azulgrana la control¨® y la habilit¨® con la espuela, con un gesto t¨¦cnico impecable, para pegarle de la mejor manera: hasta dentro.
El gol confirm¨® la vitalidad de la ¨²nica l¨ªnea que funcionaba en el bando espa?ol: el pase de Mendieta y la llegada de Gerard. Aturdida por los ¨²ltimos resultados, falta de ritmo y confusa t¨¢cticamente, la selecci¨®n de Camacho fue m¨¢s tiempo detr¨¢s del bal¨®n que portando la iniciativa, signo de equipo inferior. Pocas veces cogi¨® al rival en superioridad num¨¦rica. Bosnia procur¨® jugar siempre en funci¨®n de donde estaba la pelota, as¨ª que cuando la tuvo la llev¨® all¨¢ donde m¨¢s le conven¨ªa, tocando en las zonas blandas y buscando el uno contra uno frente a Sergi y Manuel Pablo, para encarar a Casillas, que aguant¨® al equipo en unas cuantas intervenciones de m¨¦rito.
Frente al f¨²tbol de Bosnia, Espa?a puso futbolistas, de manera que los locales jugaron m¨¢s como equipo y los forasteros actuaron por espasmos, llevados por acciones puntuales. Le falt¨® al equipo de Camacho el hilo de juego y la compensaci¨®n que le dio Smajlovic al suyo. La ausencia de entereza por parte espa?ola y el seguro transitar que se impuso Bosnia tuvo malas consecuencias para el juego durante buena parte del segundo tramo del choque. El partido se durmi¨® y qued¨® a expensas de una jugada.
Prob¨® Camacho a darle la vuelta con la entrada de Celades y de Etxeberria, pero el equipo no se revolucion¨®, sigui¨® sin cambiar de marcha, aunque fue el vasco quien decidi¨® con otro remate espectacular, cazado cuando m¨¢s sosa estaba la contienda. Bosnia busc¨® el empate con el mismo esmero que lo encontr¨® en el primer tiempo, pero err¨® frente a la porter¨ªa. Espa?a ya no se dej¨® sorprender y acab¨® atrapando un triunfo que ratifica desde el primer partido su hegemon¨ªa en las fases de clasificaci¨®n. El juego, mientras, tendr¨¢ que aguardar. Por los rivales que le quedan, tendr¨¢ tiempo de irse preparando para el pr¨®ximo Mundial. Que comience la Liga para que se pueda ser exigente con una selecci¨®n, que se remiti¨® al calendario para justificarse. El oficio est¨¢ para esos menesteres, y ayer lo utiliz¨® con todas sus consecuencias.
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