Bienvenido a casa
Agosto se ha colado por el sumidero. Hay meses que se acaban y meses que se van por las alcantarillas. Agosto se ha ido por la alcantarilla repleto de inmundicias. Ah¨ª est¨¢ esa mujer quemada viva en Legan¨¦s, o esa otra mujer que ha muerto con su hijo, apaleados ambos mientras hac¨ªan senderismo en el Himalaya. O¨ª en un bar a dos que comentaban la noticia: "?A qui¨¦n se le ocurre ir de vacaciones con un ni?o a la India?", se preguntaban.Pero no hay que marcharse tan lejos. A veces basta con acercarse a Legan¨¦s. Es un hecho aislado, dir¨ªa Cascos (ya lo dijo en su d¨ªa). Pues no, tampoco es un hecho aislado. En la primera mitad de este a?o, la violencia dom¨¦stica ha generado las mismas denuncias que durante todo el a?o anterior. Y contin¨²a subiendo. Sube todo: los maltratos, las hipotecas, la gasolina, la inflaci¨®n. Hasta la temperatura. De hecho, dicen que el ?rtico ya es navegable.
De ah¨ª la sensaci¨®n de que agosto se ha ido por el sumidero. Quiere decirse que, lejos de clausurarse, contin¨²a discurriendo por debajo de septiembre, en plan alcantarilla. Y por el interior de cada uno de nosotros, en plan infraestructura. Se viste uno de septiembre. Sale a la calle con gesto de septiembre. Hace uno proyectos con esp¨ªritu de septiembre. Lee la carta del colegio de los ni?os con ojos de septiembre, en fin, pero de s¨²bito, te viene Legan¨¦s a la cabeza y notas la presencia subterr¨¢nea de agosto envenen¨¢ndote las venas. Es como si al salir de una habitaci¨®n y cerrar la puerta tras de ti, te llevaras la habitaci¨®n contigo. Est¨¢s en el sal¨®n, pero por alguna parte sigues notando la presencia del cuarto de ba?o. Un vivo sin vivir en m¨ª.
Te pasa lo mismo si oyes mencionar la calle de Plater¨ªas, donde el coche bomba; o el hospital Doce de Octubre, donde hubo una de g¨¢nsteres la semana pasada.
Dice Felipe Goz¨¢lez que el m¨¦rito del subcomandante Marcos es que ha hecho una revoluci¨®n sin pegar un solo tiro y sin correr el peligro de que se lo pegaran a ¨¦l. Y estamos hablando de Chiapas, donde la gente va armada. Aqu¨ª vas por la calle desarmado, sin ¨¢nimo de hacer ninguna revoluci¨®n, s¨®lo con la idea fija de llegar a casa, y lo mismo te roc¨ªan con gasolina que te ponen un coche bomba. Pero aqu¨ª mismo, oyes, que no estamos hablando de lugares ex¨®ticos y lejanos como el Himalaya, donde la gente va en busca de aventuras. La aventura es cuando llegas a Barajas, o cuando sales. El otro d¨ªa, un avi¨®n volvi¨® dos veces a Barajas, por aver¨ªa, en 17 horas. Eso es aventura y lo dem¨¢s son cuentos. Eso o que te contrate una ETT. Los trabajadores temporales sufren el doble de siniestros laborales que los fijos.
No s¨¦ si a alguien se le ha ocurrido cruzar esas dos estad¨ªsticas, la de los aviones que regresan a Barajas por fallos mec¨¢nicos detectados en pleno vuelo y las del trabajo temporal. A lo mejor resulta que el mantenimiento aeron¨¢utico lo hacen mayormente personas contratadas a destajo. Aqu¨ª te pillo y aqu¨ª te mato. Pillar y matar da mucha rentabilidad. Se gana un huevo de dinero, pero aumenta la siniestralidad, como es l¨®gico. Por eso las ETT resultan m¨¢s siniestras que los maltratadores dom¨¦sticos. Hay una simetr¨ªa atroz entre la violencia dom¨¦stica y la laboral. Ambas est¨¢n subiendo a mayor velocidad que la inflaci¨®n.
Pero sin inflaci¨®n, dicen algunos, no hay progreso. Ya enfriaremos las cosas cuando lleguemos a una situaci¨®n l¨ªmite. Pues a ver c¨®mo enfr¨ªan ahora el ?rtico, que hace aguas por todas partes. Cre¨ªamos que la subida de la gasolina iba a desanimar a los pir¨®manos y ah¨ª tenemos el suceso de Legan¨¦s, por no hablar de los incendios forestales.
Mal, mal. Empezamos septiembre con la resaca de agosto. Agosto de 2000 se parece demasiado a esas noches negras que se empe?an en durar a lo largo del d¨ªa siguiente. Se trata de la versi¨®n contradictoria de amanec¨ª otra vez entre tus brazos y despert¨¦ llorando de alegr¨ªa.
Aqu¨ª estamos, amaneciendo otra vez entre los brazos de agosto, que no hemos logrado clausurar con el advenimiento de septiembre. S¨®lo que el llanto no es exactamente de alegr¨ªa. Ahora falta que venga Cascos y diga aquello que dijo en su d¨ªa de que la violencia dom¨¦stica era un suceso aislado. Pues agosto no es un suceso aislado. Sucede todos los a?os y a veces se prolonga hasta septiembre. Si estuvo usted en el Amazonas o en Terra M¨ªtica y no le pas¨® nada, consu¨¦lese. Ahora es cuando de verdad comienza la aventura.
Bienvenido a casa.
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