La mayor¨ªa de televisiones locales valencianas subsisten en plena irregularidad jur¨ªdica
La Direcci¨®n General de Comunicaci¨®n de la Generalitat tiene censadas 127 televisiones locales, sin embargo m¨¢s de la mitad de ellas, 79, que emiten por ondas terrestres, subsisten en plena irregularidad jur¨ªdica, puesto que no cuentan con la preceptiva licencia de emisi¨®n que exige la ley de Televisi¨®n Local por Ondas Terrestres de 1995 aprobada por el ¨²ltimo Gobierno socialista. Los sucesivos gobiernos del PP no han aprobado el reglamento que desarrolla dicha ley ni han fijado el cupo de emisoras que le corresponde a cada comunidad aut¨®noma, y act¨²an con permisividad.
El fen¨®meno de las televisiones locales en el Pa¨ªs Valenciano apareci¨® en la segunda mitad de los a?os ochenta con cierto retraso con respecto a otras comunidades aut¨®nomas. De hecho, cuando en 1984 empez¨® a emitir Tele Carl¨®n de Benicarl¨®, en Catalu?a ya funcionaban 40 emisoras. Diez a?os despu¨¦s, en 1994, hab¨ªa censadas 45 emisoras en todo el territorio valenciano, compartiendo el espacio de las ondas terrestres con los dos canales de TVE, adem¨¢s de Canal 9, que empez¨® a emitir en 1989, y con TV3, cuya recepci¨®n fue propiciada por Acci¨® Cultural del Pa¨ªs Valenci¨¤ (ACPV). La mayor¨ªa de estos medios de proximidad eran municipales, mientras que las emisoras privadas, salvo casos excepcionales como Tele Elx y Torrent Cable, ten¨ªan una d¨¦bil estructura empresarial y financiera. Lo cierto es que muchas de las privadas funcionaban como videoclubs comunitarios o emit¨ªan s¨®lo durante las fiestas de los pueblos.La situaci¨®n empez¨® a cambiar tras la llegada del PP a la Generalitat en 1995. El crecimiento de las emisoras ha sido espectacular durante el ¨²ltimo lustro ya que han aparecido 82 nuevas emisoras, la mayor¨ªa de ellas privadas. Actualmente hay 127 televisiones locales censadas por la Direcci¨®n General de Comunicaci¨®n de la Generalitat. De ¨¦stas, 66 est¨¢n ubicadas en la demarcaci¨®n de Alicante, 35 en Valencia y 26 en Castell¨®n. A nivel nacional emiten 741 televisiones locales, seg¨²n el ¨²ltimo recuento realizado por la Asociaci¨®n para la Investigaci¨®n de Medios de Comunicaci¨®n (AIMC) con sede en Madrid, siendo la valenciana la tercera comunidad con m¨¢s emisoras por detr¨¢s de Andaluc¨ªa y Catalu?a, y Alicante la segunda provincia espa?ola despu¨¦s de Barcelona.
Sin embargo, del total de las televisiones valencianas censadas s¨®lo 55 han proporcionado a la AIMC una ficha informativa detallada con las caracter¨ªsticas t¨¦cnicas y localizaci¨®n de la emisora, por lo que se desconoce en qu¨¦ situaci¨®n se encuentran las 72 restantes. Con todo, la investigaci¨®n de la AIMC ofrece una radiograf¨ªa bastante fiable del sector.
Estas cifras revelan la importancia y la vitalidad de este sector audiovisual, pero esconden una dura realidad. Todos los medios de emisi¨®n por ondas terrestres subsisten en plena irregularidad jur¨ªdica. Ninguno tiene la preceptiva licencia de concesi¨®n administrativa de frecuencia de emisi¨®n, seg¨²n establece la todav¨ªa vigente Ley de Televisi¨®n Local por Ondas Terrestres de 22 de diciembre de 1995, aprobada por el ¨²ltimo Gobierno socialista. Los sucesivos gobiernos del PP no han aprobado el reglamento que desarrolla dicha ley, ni tampoco han fijado el cupo de emisoras que le corresponde a cada comunidad aut¨®noma, por lo que los gobiernos regionales no han podido convocar los concursos de adjudicaci¨®n de frecuencias. "Este panorama jur¨ªdico es el mismo en toda Espa?a. Ninguna televisi¨®n local dispone del preceptivo t¨ªtulo habilitante que le permitir¨ªa legalizar su situaci¨®n", afirma Pilar Soler, jefa de servicio de la Direcci¨®n General de Comunicaci¨®n.
Esta situaci¨®n de ilegalidad, que goza de la permisividad de la Administraci¨®n, afecta sobre todo al r¨¦gimen de gesti¨®n y al ¨¢mbito de cobertura. Seg¨²n la citada ley, la difusi¨®n de las televisiones debe ser estrictamente municipal, pero en el Pa¨ªs Valenciano hay al menos 32 emisoras cuya ¨¢rea de cobertura es comarcal, seg¨²n la AIMC. Dicho texto legal regula tambi¨¦n que se conceder¨¢ s¨®lo una licencia de emisi¨®n por cada municipio, dando preferencia a las peticiones de los ayuntamientos frente a empresas privadas, aunque deja la puerta abierta para otorgar un m¨¢ximo de dos concesiones si el espacio radioel¨¦ctrico del municipio lo permite. Parad¨®jicamente tampoco se cumple este precepto, ya que hay poblaciones que superan el cupo. Elche y Valencia cuentan con cuatro televisiones locales, mientras que el n¨²mero llega a tres en Castell¨®n, Sagunto, Aspe y Benidorm. La contradicci¨®n es todav¨ªa mayor en Valencia donde las emisoras existentes son privadas y el Ayuntamieno ha renunciado a crear su propia televisi¨®n p¨²blica. Adem¨¢s, la ley descarta la gesti¨®n mixta (p¨²blica y privada), pero en Orihuela, Calpe y Villafranca del Cid funcionan tres en este r¨¦gimen.
Llegados a este punto, cabr¨ªa preguntarse por qu¨¦ la Administraci¨®n tolera esta situaci¨®n, que a su vez propicia inseguridad empresarial y laboral en estos medios. Para Rafael Xamb¨®, profesor de Sociolog¨ªa de la Universidad de Valencia y experto en comunicaci¨®n, la explicaci¨®n es obvia: "La inestabilidad jur¨ªdica favorece la arbitrariedad del poder porque permite decidir qui¨¦n emite y qui¨¦n no, es decir da pie a la persecuci¨®n por parte de las autoridades mediante fuertes multas o cierres de emisoras". Un caso significativo fue la orden de cierre de Berca TV, la televisi¨®n municipal de Algemes¨ª, municipio gobernado por el PSPV. El Ministerio de Fomento decret¨® en febrero de 1998 el cierre de la citada emisora y una sanci¨®n de un mill¨®n de pesetas, alegando que utilizaba "frecuencias radioel¨¦ctricas sin preceptiva asignaci¨®n de las mismas por la Direcci¨®n General de Comunicaciones", una situaci¨®n que parad¨®jicamente sufre el resto de televisiones. Pero el motivo real, en opini¨®n del director de la emisora, Josep Mach¨ª, es el apoyo que prest¨® Berca TV a ACPV en el conflicto que manten¨ªa con el entonces director de Canal 9, Jes¨²s S¨¢nchez Carrascosa, por las interferencias que seg¨²n ACPV provocaron t¨¦cnicos de la cadena auton¨®mica a las emisiones de f¨²tbol de TV3 en Valencia. Algemes¨ª interpuso un contencioso contra el ministerio y finalmente, en marzo de este a?o, la Audiciencia Nacional ha anulado la orden de cierre y la multa.
Expansi¨®n de las privadas
A r¨ªo revuelto en esta ley de la selva de la televisi¨®n local, ganancia de pescadores pol¨ªticos. El PP ha sabido aprovechar esta inestabilidad y participa activamente en el despliege de una red local de televisiones privadas, sobre todo en las comarcas de Alicante -donde gobierna en la mayor¨ªa de los municipios tur¨ªsticos-, adem¨¢s de apoyar el proyecto empresarial de Valencia Te Ve, renunciando a crear una televisi¨®n municipal en la capital. No es casualidad que la mayor¨ªa de emisoras privadas creadas a partir de 1995 est¨¦n ubicadas en las poblaciones gobernadas por los populares, y que Valencia Te Ve intente erigirse como hegem¨®nica en el ¨¢mbito de la televisi¨®n local valenciana.El inter¨¦s del PP valenciano por la televisi¨®n local, como un medio de poder m¨¢s para ejercer influencia pol¨ªtica e ideol¨®gica, se ha manifestado en otras partes de Espa?a. El catedr¨¢tico de Comunicaci¨®n Audiovisual de la Universidad Complutense de Madrid Enrique Bustamante, ha denunciado en varios foros que "la liberalizaci¨®n controlada" de las telecomunicaciones est¨¢ permitiendo que ayuntamientos gobernados por el PP controlen sin problemas las televisiones locales, y que otras muchas emisoras caigan en manos de empresarios afines.
Pero hay m¨¢s jugadores en la partida. Esta inestabilidad est¨¢ propiciando tambi¨¦n el desembarco de conglomerados nacionales de comunicaci¨®n, cada vez m¨¢s interesados en entrar en el mercado de la televisi¨®n local, un fen¨®meno que ya se ha dado a mayor escala en las emisoras de radio y en menor grado en prensa comarcal, como es el caso del peri¨®dico Ciudad de Alcoy, integrado ahora en el Grupo Z, o la absorci¨®n de El Peri¨°dic de l'Horta por Hermes Comunicacions, SA, empresa editora de El Punt de Girona.
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