?Chapuza cum laude o falta de informaci¨®n?
En relaci¨®n con el art¨ªculo de P¨¦rez Benlloch Una chapuza cum laude, creemos que la falta de informaci¨®n -el autor reconoce que ignora el contenido del proyecto- le llevan a conclusiones muy lejanas a la realidad, junto con datos proporcionados en su art¨ªculo que son err¨®neos. Estamos a la disposici¨®n del Sr. P¨¦rez Benlloch para aclararle cualquier aspecto de los que menciona. Aclaraciones:Uno: superficie. "Baste decir que la superficie prevista para establecer este tinglado ocupar¨ªa dos millones de metros cuadrados que se sumar¨ªan al casi mill¨®n que cubre el campus de la universidad alicantina". La superficie solicitada de la que estamos hablando (de ampliaci¨®n de campus, m¨¢s lo que se conoce como Medpark) alcanza unos 1.300.000 metros cuadrados. De ¨¦stos, apenas queda la mitad como superficie ¨²til, dadas las carreteras -alguna "impuesta"- que cruzan el Parque y el hecho que por todo su per¨ªmetro (los tres lados) deban guardarse servidumbres legales propias de autopistas, autov¨ªas y l¨ªnea de ferrocarril. El campus actual tiene unos 900.000 metros cuadrados, tambi¨¦n afectados en gran medida por las servidumbres anteriores. En total para unos 30.000 alumnos la superficie ¨²til del Campus + Ampliaci¨®n + Medpark no llegar¨ªa al 1.200.000 metros cuadrados, cifra inferior a la media valenciana normalizada con el n¨²mero de alumnos. Hay que hacer notar que la Administraci¨®n Auton¨®mica, en la memoria presentada ante el Consejo de Universidades para la creaci¨®n de la Universidad Miguel Hern¨¢ndez, recog¨ªa para esta unas necesidades de 2.500.000 metros cuadrados (sin Parque Cient¨ªfico y recogiendo una demanda siempre inferior al 50% de estudiantes respecto a la Universidad de Alicante).
Dos: terrenos. La adquisici¨®n de terrenos se hizo despu¨¦s de que la Conselleria de Educaci¨®n nos reprochara p¨²blicamente que le pidi¨¦ramos inversiones en edificios sin tener los terrenos. Segundo, incoherentemente con lo anterior, unos meses m¨¢s tarde, la misma pusiera pegas a la petici¨®n de fondos para tal fin. Tercero, solicitar al Ayuntamiento de Alicante una cesi¨®n de los mismos y, tras que el propio diario EL PA?S se?alara que algunos propietarios se reorganizaban para hacer frente al campus, negarse a ello. Con estas adquisiciones, por ejemplo, pudimos concretar los terrenos para dos licencias que el Ayuntamiento nos concedi¨® para no perder fondos Feder del anterior ejercicio y poder construir el animalario y una planta de petrolog¨ªa. De no tener los terrenos ahora, probablemente los riesgos de que Medpark dejara de ser un proyecto de iniciativa p¨²blica universitaria se hubieran incrementado notablemente. ?Nos limit¨¢bamos a contemplarlo o defend¨ªamos nuestra expansi¨®n futura con nuestros limitados medios?
Tres: financiaci¨®n o fuentes financieras. Se trata de un proyecto que no prev¨¦ una ejecuci¨®n "inmediata" del 100% de la superficie sino que, racionalmente, se establece una zona de reserva futura que el tiempo determinar¨¢ la velocidad de su desarrollo, tal como se ha hecho en la previsi¨®n de las mejores universidades del mundo. Esto es, se intenta no condicionar un entorno inmediato de altos costes tal como ocurre en aquellas universidades que han quedado "encajonadas" sin posibilidad de desarrollar su potencial end¨®geno y est¨¢n condicionadas a su fragmentaci¨®n territorial en materias dif¨ªcilmente divisibles. Por otra parte, conscientes de las limitaciones que nos han impuesto en el pasado, solo se aplican fondos ya comprometidos con las Administraciones, bien a trav¨¦s de los Planes Plurianuales de Inversi¨®n, bien a trav¨¦s de Fondos Feder. Adicionalmente, el proyecto abre otra puerta: la capacidad propia de atracci¨®n de inversiones en I+D en sectores de futuro. Por ¨²ltimo, no se solicita ninguna infraestructura de apoyo que pueda implicar una inversi¨®n p¨²blica relevante. Tal como ocurre en las ciudades u otras actuaciones de desarrollo urban¨ªstico, el tiempo, seg¨²n el nivel y ritmo de desarrollo del "contenido del Parque y campus", ir¨¢ aconsejando o justificando otras actuaciones. No se pide nada a priori de lo que no demostremos con creces ser acreedores o se justifique ampliamente en la propia evoluci¨®n del Proyecto. En este sentido cabr¨ªa decir que el parecido de Medpark con Terra M¨ªtica o la Ciudad de la Luz ser¨ªa como la de un lago con un desierto.
Cuatro. La idea no sabemos si es genial o no, pero ha sido expuesta a todos cuantos nos la han solicitado y quienes la conocen a fondo nos han transmitido los mayores elogios p¨²blicos, privados, por escrito y verbalmente en cientos de ocasiones. Quiz¨¢s no es el sitio de recordar "los ¨¦xitos" de esta iniciativa, especialmente en un tema de la dificultad de las nuevas tecnolog¨ªas y de la sociedad de la informaci¨®n de las que, frecuentemente, ha dado cuenta el diario EL PA?S o Ciberp@is. Ha recibido apoyos muy s¨®lidos de los m¨¢ximos especialistas y de las instituciones m¨¢s competentes en la materia.
Quinto. Los t¨¦cnicos responsables han colaborado con la mayor parte de los t¨¦cnicos de todas las instituciones afectadas. La Conselleria de Obras P¨²blicas no puso ninguna pega expl¨ªcita en la fase de contactos previos. Hay hasta cartas de agradecimiento por su labor de apoyo al Parque. Hubo contactos previos con el Ayuntamiento de Alicante, la Conselleria de Educaci¨®n -aunque ¨¦sta lo niega- y otros entes p¨²blicos y privados competentes. Es evidente que arrancar un consenso era dif¨ªcil por cuestiones que a estas alturas son obvias. ?Deb¨ªa la Universidad renunciar a su futuro o defenderlo?
Reiteramos nuestra disposici¨®n a facilitar toda aquella informaci¨®n que se nos requiera al respecto.
Equipo de Gobierno de la Universidad de Alicante.
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