El ox¨ªgeno

Usted a lo mejor no tiene donde caerse muerto, pero es feliz porque respirar le sale gratis. Pues usted est¨¢ equivocado porque el Gobierno acaba de descubrir el espacio radioel¨¦ctrico y se ha mostrado dispuesto a privatizarlo antes incluso que la Seguridad Social. Quiere decirse que usted ya no podr¨¢ enviar ondas telep¨¢ticas a su amada. Pero podr¨¦ respirar, se dir¨¢ usted. Pues podr¨¢ respirar de momento y relativamente, porque hay las mismas razones para privatizar el espacio radioel¨¦ctrico que la atm¨®sfera. Una vez que se entra en una l¨®gica, por disparatada que sea, es muy dif¨ªcil salirse de ella, y el ox¨ªgeno tiene mucha demanda, tanto o m¨¢s que la radioelectricidad. A lo mejor, el d¨ªa de ma?ana sale usted a la calle a respirar y le cobran un canon porque la atm¨®sfera ya no es de todos, sino de Telef¨®nica o de quienquiera que haya podido pagar por ella lo que pida el Gobierno.Lo que no sabemos es si la atm¨®sfera se adjudicar¨ªa por subasta o concurso. Cada modalidad tiene sus pros y sus contras, que dir¨ªa Birul¨¦s. Con la subasta el Gobierno podr¨ªa obtener dinero para mejorar la vida de los ciudadanos, como es su obligaci¨®n, pero el concurso garantizar¨ªa unos precios asequibles del litro de ox¨ªgeno y una mayor calidad del envase. Cuanto menos paguen las empresas adjudicatarias, m¨¢s dispuestas estar¨¢n, como es l¨®gico, a fabricar botellas ligeras en vez de reciclar las pesadas bombonas del butano. Y llevar¨¢n el ox¨ªgeno a todas partes, al contrario de lo que suced¨ªa con las l¨ªneas telef¨®nicas, que s¨®lo se instalaban all¨ª donde eran rentables. Esa visi¨®n salvaje del negocio se ha acabado gracias al concurso. El Gobierno alem¨¢n deber¨ªa pensar en devolver a las empresas el dinero obtenido por medio de la subasta a la vista de los excelentes resultados filos¨®ficos que el concurso est¨¢ dando en nuestro pa¨ªs. El problema es que es muy obcecado.

Con todo, lo que parece mentira es que el espacio radioel¨¦ctrico estuviera ah¨ª y no hubiera reparado nadie en ¨¦l hasta que se le ocurri¨® a Aznar. ?sa es la diferencia entre gobernar con esp¨ªritu de empresa privada o de funcionario. Y por eso el ox¨ªgeno est¨¢ al caer tambi¨¦n. En cuanto a la gasolina, bajar¨¢ cuando haya m¨¢s competencia.