La Real baila al Deportivo sin tumbarlo

Clemente solicit¨® bien poco a sus jugadores: velocidad y anticipaci¨®n para borrar la goleada de Vigo. La modestia de lo requerido contrast¨® con la cuant¨ªa de lo obtenido. La Real, de pronto ¨¢gil y vertical, bail¨® de entrada a un Deportivo aturdido, impreciso en sus pases y un tanto apelmazado: a los cinco minutos de partido el conjunto de Irureta ya hab¨ªa encajado un gol. En tan escaso margen de tiempo, los donostiarras descubrieron el toque y el contragolpe, dos virtudes ninguneadas en su arranque de Liga. Collet y Jankauskas se encargaron de asumir el cambio de actitud; el primero a la carrera, por la banda derecha, lanzado, mientras que el lituano, menos el¨¦ctrico, se serv¨ªa de limpios giros de tobillo para sortear a la lenta defensa gallega. El Deportivo siempre pareci¨® jugar con un segundo de retraso, y el efecto sobre el campo le hizo casi invisible, o cuando m¨¢s, triste. El campe¨®n segu¨ªa el encuentro abrumado por el despliegue de adrenalina rival, superado por la alegre improvisaci¨®n de los donostiarras.El encuentro entr¨® en v¨ªa muerta y sin visos de cambio. La Real disfrutaba a la contra y el Deportivo no acertaba a sacudirse la pereza. Loren alter¨® el gui¨®n con una patada innecesaria que le coloc¨® en la ducha. Los banquillos enloquecieron para readaptarse al nuevo panorama: Clemente reforz¨® su defensa e Irureta su ataque. En dos minutos, todav¨ªa fr¨ªos, Djalminha y Pandiani fabricaron el empate. Este ¨²ltimo lo hizo todo en un santiam¨¦n: saltar sobre el c¨¦sped, marcar, patear a Gurrutxaga y salir del terreno expulsado. No se sabe si su breve actuaci¨®n benefici¨® o perjudic¨® a su equipo. El caso es que desde ese momento el encuentro abraz¨® el surreralismo: Djalminha, reci¨¦n recuperado de una lesi¨®n, abandon¨® el campo con molestias 10 minutos despu¨¦s de su ingreso; el f¨²tbol se convirti¨® en un asunto visceral y el Deportivo trat¨® brevemente de usurpar el papel de su rival. Sin lograrlo. La Real monopolizaba la energ¨ªa y enseguida volvi¨® a superar por zancada al Deportivo, siempre retrasado, salvo en el marcador final.