La magia amarilla de Barrufet

Circula en el mundillo del balonmano una tesis seg¨²n la cual todo gran equipo s¨®lo puede forjarse en base a un gran portero. En este sentido, Juan de Dios Rom¨¢n, el seleccionador espa?ol, puede estar tranquilo.David Barrufet, de 30 a?os, posee la magia de los grandes guardametas. Su personalidad tranquila, su car¨¢cter sosegado, su expresi¨®n siempre comedida, le permiten no perder la calma en los momentos importantes. Cuando todo el equipo bulle, cuando sus seis compa?eros tienen ya los nervios a flor de piel, ¨¦l es capaz de mantenerse sereno para poder intuir la direcci¨®n del lanzamiento de sus rivales y buscar la mejor opci¨®n de pase para armar el contraataque.

Esos valores, que ha ido adquiriendo en su larga trayectoria en el Barcelona y la selecci¨®n, le han convertido ya en uno de los tres mejores porteros del mundo.

"Su mejor virtud es que para incluso cuando no est¨¢ bien", asegura precisamente uno de sus compa?eros de equipo.

El destino de Barrufet en el balonmano ha estado marcado por el t¨¦cnico azulgrana Valero Rivera. No s¨®lo porque, de alguna forma, ha dirigido su carrera, sino porque fue ¨¦l quien impidi¨® que fuera arrastrado hacia el baloncesto por su estatura y le llev¨® de la mano del Safa al Bar?a a los 15 a?os de edad.

En su larga carrera, Barrufet ha debido salvar algunos momentos dif¨ªciles. Sufri¨® una dur¨ªsima lesi¨®n en una rodilla en 1993 durante un partido en el campo del G¨¢ldar justo el d¨ªa en que no llev¨® pantalones amarillos. Desde entonces, ¨¦sa se ha convertido en una de sus obsesiones. Tanto Kappa, primero, como Nike, despu¨¦s, tuvieron que dise?ar esta prenda porque no estaba en sus cat¨¢logos y ¨¦l la exigi¨®.

Sin embargo, su peor momento se produjo en 1997 cuando su hermano mayor, Jaume, falleci¨® en un accidente de moto. Aquello le marc¨®. Pero acab¨® reforzando su car¨¢cter y potenciando su evoluci¨®n.

Ahora Barrufet, a punto de concluir la carrera de Derecho, no es s¨®lo una pieza clave de la selecci¨®n, tal como demuesra en Sydney, sino que atesora un palmar¨¦s que supera los 50 t¨ªtulos. Por eso Rivera le tiene ya comprado un pasacorbatas de oro para ¨¦l y una aguja de oro rematada con un brillante para su esposa. Un regalo que reserva a los mejores.