S¨¢lvese quien pueda
La popularidad ya hab¨ªa inundado casi por completo el hemiciclo y en los bancos socialistas hab¨ªa un vac¨ªo aterrador. S¨®lo el diputado Andr¨¦s Perell¨® hab¨ªa madrugado por miedo a que le quitaran el esca?o. Entonces algunos diputados del PP corr¨ªan apuestas a que al nuevo s¨ªndic socialista, Joaquim Puig, le hab¨ªa entrado la p¨¢jara el d¨ªa de su deb¨² y no se presentaba. Sin embargo cruz¨® la meta en el ¨²ltimo minuto, a las 10.30, tras el goteo de ¨¢tomos que componen y sacuden su partido.Eligi¨® un terno negro con camisa azul basalto, ideal para presidir un funeral, y llevaba varias carpetas en jarras. Por el contrario, Eduardo Zaplana lleg¨® ligero de carga, enfundado en un traje gris perla con camisa a rayas azules y zapatos con cascabillos, perfecto para firmar un traspaso inmobiliario en una notar¨ªa. Puig solt¨® el lastre, atraves¨® el hemicilo hasta donde Zaplana atend¨ªa el besamanos pegajoso de sus diputados, y ambos se fundieron en un abrazo deportivo, mientras por dentro quiz¨¢ pon¨ªan toda su pericia en maldecirse.
Zaplana subi¨® al estrado hecho un brazo de mar, puso cara de gran estadista, como si fuera el Bismarck de la Costa Blanca, y ley¨® una veintena de folios en los que se demostraba de modo emp¨ªrico que antes de 1995, que es cuando el PP ocup¨® el Palau de la Generalitat, en esta tierra s¨®lo hab¨ªa desbarajuste, perfidia e infortunio. Y all¨ª estaba Rita Barber¨¢, vestida de rojo Ferrari, mir¨¢ndose las u?as para dar color a ese inventario de logros. Zaplana estuvo llenando su pechera de hojalata hasta el mediod¨ªa, mientras Puig parec¨ªa naufragar en sus propios papeles y bajo los escombros no se mov¨ªa casi nada.
Tras el receso en el bar, Puig apur¨® un habano, sac¨® pecho, tomo carrerilla y subi¨® al podio con una carpeta roja. Bebi¨® y solt¨® para s¨ª mismo: "Esta oposici¨®n cumplir¨¢ con su deber", que son¨® para Zaplana como "Se va a enterar". Fue el preludio de un discurso que en el fondo repasaba aspectos muy candentes, aunque el tono sexenal del nuevo portavoz desactivaba toda su furia cr¨ªtica y le daba formato de letan¨ªa. A las dos de la tarde Zaplana y Puig hab¨ªan logrado trasladar la f¨®rmula cualitativa del Valium a la atm¨®sfera del hemiciclo con sus discursos, lo cual era un avance cient¨ªfico. Incluso abundaron en unas contrarr¨¦plicas interminables en las que se notaba que Zaplana hab¨ªa desechado de antemano zamparse a Puig como un fla¨®, y ¨¦ste se afanaba por parecer nuevo en esta plaza, pese a su escorzo g¨®tico.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Plenos parlamentarios auton¨®micos
- V Legislatura Comunidad Valenciana
- Grupos parlamentarios
- Debates parlamentarios auton¨®micos
- Eduardo Zaplana
- Opini¨®n
- Ximo Puig
- Declaraciones prensa
- PSPV-PSOE
- PPCV
- Generalitat Valenciana
- PSOE
- Parlamentos auton¨®micos
- PP
- Comunidad Valenciana
- Gobierno auton¨®mico
- Parlamento
- Partidos pol¨ªticos
- Pol¨ªtica auton¨®mica
- Comunidades aut¨®nomas
- Gente
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Pol¨ªtica municipal
- Pol¨ªtica
- Espa?a