Los contagios de Maeso

La localizaci¨®n de un brote de hepatitis C en la Comunidad Valenciana, que finalmente alcanz¨® a 209 personas, infectadas todas ellas entre 1994 y 1998, es un precedente demasiado terrible como para imaginar su repetici¨®n. Entonces, el responsable de los contagios fue un m¨¦dico anestesista de prestigio, Juan Maeso (Madrid, 1941), adicto a los opi¨¢ceos, que infect¨® el virus a sus pacientes cuando estaban en el quir¨®fano.Una exhaustiva investigaci¨®n, llevada a cabo por un equipo multidisciplinar encabezado por el catedr¨¢tico de gen¨¦tica de la Facultad de Biol¨®gicas de la Universidad de Valencia, Andr¨¦s Moya, concluy¨® que el responsable de los contagios era Maeso, jefe de anestesiolog¨ªa del hospital maternal de la ciudad sanitaria de La Fe, de Valencia. Fue el ¨²nico foco de contagio.

Para llegar a esa conclusi¨®n, se analizaron muestras de m¨¢s de 500 posibles afectados y se invirtieron 60 millones de pesetas en la adquisici¨®n de un equipamiento muy avanzado, que permiti¨® realizar el trabajo a expertos en biolog¨ªa molecular, virolog¨ªa, estad¨ªstica o en an¨¢lisis filogen¨¦ticos. Las consiguientes pruebas de ADN no dejaron lugar a duda sobre los resultados.

Uno de los aspectos m¨¢s dram¨¢ticos de aquellos contagios fue la angustia que caus¨® entre los potenciales afectados tras la imputaci¨®n del doctor Maeso en el caso. En la conmoci¨®n tambi¨¦n tuvo que ver el hecho de que se trataba del contagio de un virus que no era de los m¨¢s estudiados en aquellos momentos.

La hepatitis C tiene unas consecuencias muy graves. En el 70 o el 75% de los casos, la enfermedad se convierte en cr¨®nica. De ¨¦stos, un 20% deriva en una cirrosis en el plazo de 10 o 20 a?os, y otro 20% degenera en c¨¢ncer de h¨ªgado. Todo, desde luego, con el paso del tiempo.