"A¨²n no tengo distancia para escribir otro libreto de ¨®pera"
El escritor Justo Navarro (Granada, 1953) disfruta estos d¨ªas del estreno de Don Quijote, de La Fura dels Baus, en el teatro del Liceo, en Barcelona. Es su primera experiencia como autor de un libreto de ¨®pera, que coincide con la publicaci¨®n de su ¨²ltima novela, El alma del controlador a¨¦reo. Pregunta. ?Qu¨¦ le ha parecido trabajar con La Fura dels Baus?
Respuesta. Ellos dicen que quieren contaminar la ¨®pera, pero contaminan a todo el que tienen alrededor. Son terriblemente fecundos y vehementes, aunque cuando trabajas cerca de ellos son al mismo tiempo terriblemente reposados e inteligentes. La experiencia ha sido estupenda.
P. Escribir un libreto de ¨®pera tienen poco que ver con una novela, ?no?
R. S¨ª, es una sensaci¨®n nueva el contacto directo con el p¨²blico. El escritor se comunica a trav¨¦s de la imaginaci¨®n con sus posibles lectores; en el teatro est¨¢ en contacto con los espectadores.
P. ?Le ha despertado el gusanillo de la ¨®pera?
R. Todav¨ªa no tengo la distancia necesaria. Voy a esperar que pasen estos nueve d¨ªas de representaciones y ya pensar¨¦ con m¨¢s calma. La respuesta del p¨²blico ha sido espl¨¦ndida, aunque es una propuesta dif¨ªcil; por lo tanto tambi¨¦n hay personas que no lo aceptan. Pero es lo bueno que tiene un espect¨¢culo as¨ª. Es una base para discutir.
P. En la mayor¨ªa de las ¨®peras cl¨¢sicas el libreto es bastante simple ?C¨®mo concibe un libreto de ¨®pera contempor¨¢nea?
R. S¨ª. Los libretistas hoy viven en otro mundo y hablan otra lengua.
P. ?Sigue siendo un espect¨¢culo en el que manda la m¨²sica y las voces y el libreto queda relegado a un segundo plano?
R. No lo creo. Lo bueno que tiene la ¨®pera es la uni¨®n ¨²nica de palabra y m¨²sica. Es teatro cantado, y el teatro es palabra sobre el escenario. Simplemente, ser¨¢n unas palabras de la ¨¦poca en la que la ¨®pera se escribe.
P. La ¨®pera est¨¢ en transformaci¨®n en los aspectos esc¨¦nicos, en la interpretaci¨®n.
R. S¨ª ha variado la base t¨¦cnica. Los medios que se pueden utilizar en el escenario se han enriquecido much¨ªsimo. En la historia de la ¨®pera ha sido importante el escenario, la escenograf¨ªa, el aparato teatral. Ahora toca hacerlo con unos medios t¨¦cnicos nuevos.
P. ?C¨®mo vislumbra el futuro?
R. Est¨¢ surgiendo una nueva ¨®pera. En alg¨²n momento eso tocar¨¢ tambi¨¦n a las dimensiones de los teatros y alcanzar¨¢ al problema de la amplificaci¨®n de voces que ahora es intocable. Ir¨¢ creciendo el p¨²blico, romper¨¢ los peque?os teatros y llegar¨¢ un d¨ªa en que eso sea necesario. Ser¨¢ probablemente la revoluci¨®n de la ¨®pera.
P. Su ¨²ltima novela, El alma del controlador a¨¦reo, habla de un crimen, pero est¨¢ tejida sobre unas relaciones familiares convencionales.
R. Yo creo que la familia es un buen punto de partida narrativo, porque nuestras primeras historias, para bien o para mal, nos las cuentan nuestros padres y suelen ser las historias de la familia. Es la parte de nuestra memoria que nos regalan, y la literatura esta hecha de memoria. Yo creo que la familia tiene una importancia capital, en mi historia y en la de cualquiera.
P. ?Cualquiera tiene tantos enga?os como la de su novela?
R. La memoria es una fuente de enga?os, la prueba es que nuestros recuerdos hay veces que no coinciden con los de personas pr¨®ximas. Sin intenci¨®n de enga?ar a nadie, cada uno construye su memoria seg¨²n su necesidad. Lo m¨¢s curioso es que esos recuerdos van cambiando, como una especie de traje m¨¢gico que se adapta a nuestro desarrollo interior.
P. ?Nunca tuvo la tentaci¨®n de escribir con ese argumento una novela negra?
R. A m¨ª me gusta decir que la novela es una autobiograf¨ªa ficticia. Lo que me interesaba era inventar una voz que recordara mi tiempo y mi espacio, es decir, desde los a?os 70 hasta el 2000. No me interesaba escribir una novela negra, sino una memoria, un libro de recuerdos, entender un tiempo hist¨®rico a trav¨¦s de los recuerdos de otro. Mi prop¨®sito era escribir como si estuviera recordando algo que no he vivido y no el artificio literario de una novela negra, de misterio, con todas sus piezas bien encajadas.
P. Las memorias son imaginarias, pero no los escenarios de Granada.
R. S¨ª, es muy concreto. La ficci¨®n sirve como un reactivo que se hecha a un elemento qu¨ªmico para verlo mejor a trav¨¦s del microscopio. A?ado ficci¨®n para ver mejor la realidad.
P. Ha estado seis a?os sin publicar. Si ahora se dedica a la ¨®pera, a¨²n se va a demorar m¨¢s su pr¨®xima novela.
R. En ese tiempo he escrito tambi¨¦n el libreto. Tuve un problema, porque me quede colgando de la voz que contaba la historia de La casa del padre [publicada en 1994]. Una manera de librarme fue traducir los cuentos de Scott Fitzgerald. Otra cosa buena ha sido escribir el libreto.
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