Los Presupuestos del Estado en Andaluc¨ªa

Como cada a?o, el comienzo del curso pol¨ªtico viene marcado por la presentaci¨®n por parte del Gobierno de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) ante las Cortes Generales. Tras la misma, en todas las comunidades aut¨®nomas se desata la fiebre de conocer cu¨¢les son los efectos particulares que van a producir en cada territorio. Andaluc¨ªa no es una excepci¨®n, de ah¨ª que conocer los entresijos presupuestarios sea fundamental para seguir el debate pol¨ªtico.?Qu¨¦ territorios se benefician los PGE?

Con car¨¢cter general, los estudios ponen de manifiesto que las comunidades con menor renta y producci¨®n resultan beneficiadas de la acci¨®n del Gobierno. La explicaci¨®n se encuentra en que, en t¨¦rminos globales, el gasto tiende a repartirse en funci¨®n de la poblaci¨®n y el ingreso en funci¨®n de la renta y de la producci¨®n. Eso hace que las comunidades con menor renta y producci¨®n salgan beneficiadas de la acci¨®n gubernamental y, en consecuencia, que Andaluc¨ªa mantenga un saldo positivo con car¨¢cter general y en t¨¦rminos absolutos.

?Pueden alterarse los saldos de los territorios con los PGE de cada a?o?

En valores absolutos es pr¨¢cticamente imposible, ya que la estructura de los principales impuestos (IRPF, sociedades, IVA y especiales sobre el consumo) y la estructura del gasto (pensiones, desempleo, sanidad, educaci¨®n, etc¨¦tera) son muy dif¨ªcilmente modificables incluso a largo plazo. No obstante, en t¨¦rminos comparativos con situaciones anteriores y en t¨¦rminos relativos con los restantes territorios, s¨ª pueden tener una incidencia importante los PGE de cada a?o y la tendencia que a medio plazo estos van marcando.

?Cu¨¢l ha sido la tendencia de los PGE de los ¨²ltimos cuatro a?os?

En lo que pueda afectar a Andaluc¨ªa, la pol¨ªtica del Gobierno ha estado orientada por: sustituci¨®n de impuestos directos por indirectos, control de gastos sociales, reparto de la financiaci¨®n auton¨®mica sin considerar la poblaci¨®n real y gasto de inversi¨®n repartido discrecionalmente. En todos los casos, la tendencia ha sido desfavorable para Andaluc¨ªa, ya que ha significado una reducci¨®n de su participaci¨®n en el gasto del Estado o un aumento de los pagos de los andaluces por impuestos.

?C¨®mo nos afecta la pol¨ªtica fiscal del Gobierno?

La sustituci¨®n de impuestos directos por indirectos, consistente en disminuir el IRPF y aumentar los impuestos sobre consumos espec¨ªficos (hidrocarburos, tabaco, alcohol, etc¨¦tera) ha perjudicado a Andaluc¨ªa porque mientras el IRPF grava la renta, los impuestos indirectos gravan el consumo y Andaluc¨ªa tiene una mayor participaci¨®n en el consumo (donde suben los impuestos) y una menor participaci¨®n en la renta (donde bajan los impuestos). Como adem¨¢s la reforma del IRPF ha producido una rebaja de impuestos mayor para las rentas m¨¢s altas, el recorte del IRPF ha beneficiado en t¨¦rminos relativos m¨¢s a las comunidades con mayor renta.

?C¨®mo nos afecta el control del gasto social?

El gasto social del Estado se realiza principalmente en prestaciones econ¨®micas (pensiones, desempleo, etc¨¦tera). Las mismas se distribuyen fundamentalmente en funci¨®n al n¨²mero de afectados y dado que en Andaluc¨ªa el peso es mayor, sobre todo en el caso de las prestaciones por desempleo, su recorte o control conlleva que, en t¨¦rminos comparativos con situaciones precedentes, Andaluc¨ªa resulte perjudicada. Sobre todo, si adem¨¢s se tiene en cuenta que, en desempleo, la pol¨ªtica del Gobierno ha consistido en sustituir cobertura del desempleo (pagos a los desempleados) por bonificaciones y subvenciones a las cotizaciones (pagos a empresarios).

?C¨®mo nos afecta el sistema de financiaci¨®n auton¨®mica?

El sistema de financiaci¨®n auton¨®mica se basa en un reparto original de fondos, en su mayor parte aportados por el Estado, seg¨²n la poblaci¨®n. En 1996, cuando se aprob¨® el nuevo sistema, no se actualiz¨® el valor de dicha poblaci¨®n, de forma que se est¨¢ repartiendo la financiaci¨®n seg¨²n la poblaci¨®n de 1988. Como en Andaluc¨ªa ¨¦sta ha crecido sensiblemente m¨¢s que en las mayor¨ªa de las comunidades, el resultado ha sido una reducci¨®n de los ingresos per c¨¢pita en t¨¦rminos comparativos con las restantes comunidades. La poblaci¨®n no se ha actualizado en ninguno de los Presupuestos Generales del Estado desde 1996. Adem¨¢s no se ha dotado la deuda hist¨®rica.

?C¨®mo nos afectan las inversiones del Estado?

La pol¨ªtica de inversiones del Estado no se puede evaluar a corto plazo, ya que los fondos pueden variar sensiblemente como consecuencia de la ejecuci¨®n de grandes proyectos de inversi¨®n que se concentran en determinadas zonas. No obstante, a medio y largo plazo, su distribuci¨®n debe converger a un reparto en funci¨®n a la poblaci¨®n y al territorio afectado. En los ¨²ltimos cuatro a?os la media de inversi¨®n presupuestada en los PGE en Andaluc¨ªa ha sido de algo m¨¢s del 12,5%, mientras que nuestra poblaci¨®n representa aproximadamente el 18% y nuestro territorio el 17,3%, con lo que se puede afirmar que la pol¨ªtica inversora del Gobierno est¨¢ perjudicando a Andaluc¨ªa. Adem¨¢s, Andaluc¨ªa recibe menos proporcionalmente por Convenios de Inversi¨®n y por Fondo de Cohesi¨®n u otros fondos europeos, que representan una forma indirecta de inversi¨®n, mediante la cofinanciaci¨®n o la transferencia de recursos a la Junta de Andaluc¨ªa para inversi¨®n.

?Cu¨¢l es el resultado econ¨®mico para Andaluc¨ªa de los PGE de los ¨²ltimos a?os?

El resultado de la pol¨ªtica presupuestaria del Gobierno puede resumirse en un recorte en el crecimiento de la producci¨®n y la renta. Por una parte, el crecimiento de la demanda agregada interna a corto plazo se ve reducido por: un menor gasto p¨²blico como consecuencia de la menor financiaci¨®n auton¨®mica; un menor consumo privado asociado al menor crecimiento de la renta disponible de los andaluces como consecuencia del control del gasto en las prestaciones sociales y de la sustituci¨®n de impuestos directos por indirectos; y una reducci¨®n del crecimiento gasto de inversi¨®n asociada al menor gasto de inversi¨®n del Estado (PGE) y de la comunidad (Convenios de Inversi¨®n, Fondo de Cohesi¨®n, etc¨¦tera).

Adem¨¢s, a largo plazo, el menor gasto en educaci¨®n, por la financiaci¨®n auton¨®mica y la menor inversi¨®n repercuten en la acumulaci¨®n de capital humano y f¨ªsico, respectivamente, haciendo que ¨¦stos no crezcan al ritmo que le corresponder¨ªa y llevando a que se reduzca la producci¨®n potencial a largo plazo.

?Cambian algo los PGE para el 2001?

En realidad no se aprecia ning¨²n cambio destacable. No se reconoce el censo de poblaci¨®n ni la deuda hist¨®rica, no se alteran los criterios de reparto de los convenios de inversi¨®n o los fondos europeos, se siguen aumentando los impuestos indirectos, las pensiones crecen a una inflaci¨®n prevista 1,6 puntos por debajo de la actual, no se modifican las prestaciones por desempleo y la inversi¨®n del Estado se sit¨²a en el 14%. Es decir, se contin¨²a con la misma pol¨ªtica presupuestaria en lo que afecta a Andaluc¨ªa.