Un convulso reinado de 15 a?os
Han pasado 15 a?os, pero la vida de Gari Kasp¨¢rov es tan intensa que parecen muchos m¨¢s. Cuando, el 9 de noviembre de 1985, se convirti¨® en el campe¨®n del mundo m¨¢s joven de la historia (ten¨ªa 22 a?os), muchos ciudadanos sovi¨¦ticos interpretaron su victoria sobre el h¨¦roe nacional Anatoli K¨¢rpov como una afirmaci¨®n de la perestroika (renovaci¨®n). Ambos, con potentes padrinos en el Kremlin, simbolizaban dos maneras de entender la vida en la URSS, y a Kasp¨¢rov le falt¨® tiempo para declararse "embajador cultural" de Mija¨ªl Gorbachov y llamar "dictador" al filipino Florencio Campomanes, presidente de la Federaci¨®n Internacional de Ajedrez (FIDE). El nuevo campe¨®n era un terremoto, como el que registraron los sism¨®grafos de Bak¨² (Azerbaiy¨¢n) el 13 de abril de 1963, d¨ªa de su nacimiento.Una vez en el trono, Kasp¨¢rov fue un volc¨¢n de noticias. Su encarnizada rivalidad con K¨¢rpov hasta 1990 -165 partidas entre s¨ª, unas 600 horas enfrentados en un escenario y miles de horas m¨¢s pensando en el otro- quiz¨¢ sea la mayor en la historia del deporte. Su guerra contra la FIDE provoc¨® un cisma, en 1993, a¨²n no resuelto; sus relaciones con el magnate ruso Kirs¨¢n Iliumy¨ªnov, actual presidente de la FIDE, son p¨¦simas. Su carisma, ambici¨®n, energ¨ªa y creatividad contribuyeron a una creciente popularidad del ajedrez en todo el mundo. Recibido por varios jefes de Estado, conferenciante hasta en el Pent¨¢gono, logr¨® lo que parec¨ªa imposible en EE UU desde que Bobby Fischer renunci¨® a defender el t¨ªtulo en 1975: su retrato adorn¨® las calles de Manhattan y las primeras p¨¢ginas de los diarios estadounidenses durante el segundo duelo con la computadora Deep Blue, en 1997. Por ejemplo, el New York Times titul¨®: "?Ser¨¢ este hombre capaz de salvar al g¨¦nero humano?".
En su vida extradeportiva tampoco faltan los sobresaltos. De padre jud¨ªo y madre armenia, tuvo que escapar de Bak¨² en 1990 tras ver c¨®mo armenios y azer¨ªes se mataban en las calles; su influencia le permiti¨® fletar un avi¨®n especial para ¨¦l y sus allegados, el ¨²ltimo que sali¨® del aeropuerto antes de que los rebeldes lo cerrasen. Reneg¨® entonces de Gorbachov, a quien hab¨ªa advertido previamente de que deb¨ªa enviar los tanques a Azerbaiy¨¢n para evitar el estallido racial, y apoy¨® a Bor¨ªs Yeltsin mucho antes de que fuera presidente. Despu¨¦s le critic¨® y pas¨® a las filas del general Alex¨¢nder L¨¦bed. A pesar de sus devaneos pol¨ªticos y su implicaci¨®n en varios negocios, mantuvo el t¨ªtulo oficioso con facilidad frente al brit¨¢nico Nigel Short en 1993.
Un a?o despu¨¦s defendi¨® el t¨ªtulo, de nuevo con ¨¦xito, en Nueva York contra el indio Viswanathan Anand.
Kasp¨¢rov tiene gran facilidad para crearse enemigos, no s¨®lo por envidia. Muy pocos ajedrecistas se declaran amigos suyos. A partir de ahora, privado del poder del trono, lo har¨¢n menos todav¨ªa.
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