Dos de las arrestadas pidieron asilo pol¨ªtico en la Embajada de Cuba al sentirse vigiladas

Un sorprendente movimiento de las supuestas etarras Ainara Esteran y Nerea Garro precipit¨® una operaci¨®n policial contra el comando Madrid que estaba siendo demorada para apurar al m¨¢ximo el seguimiento de los activistas. Ambas mujeres, al sentir sobre sus pasos a la polic¨ªa, se subieron a un taxi a las seis de la tarde del lunes; se fueron a la Embajada de Cuba en Madrid, sita en el paseo de La Habana, y entraron por la verja. Las dos liberadas etarras llegaron a pedir asilo en Cuba, pero les fue denegado. La polic¨ªa las detuvo cuando abandonaron "voluntariamente" la sede diplom¨¢tica.

Los investigadores a¨²n se preguntaban ayer qu¨¦ motivos llevaron a Ainara Esteran y Nerea Garro a buscar refugio en la Embajada de Cuba -pa¨ªs en el que residen etarras y ex etarras-, cu¨¢l era su verdadera intenci¨®n y si lo hicieron porque hab¨ªan recibido instrucciones de la direcci¨®n de ETA en Francia para acudir a esa sede diplom¨¢tica.Las dos mujeres, cuya presencia en Madrid hab¨ªa sido detectada el pasado 31 de octubre, hab¨ªan estado sometidas a un intenso seguimiento desde ese mismo d¨ªa, en el que la capital de Espa?a a¨²n se curaba las heridas tras el triple asesinato que la banda hab¨ªa perpetrado el d¨ªa anterior.

Supuestamente, las dos mujeres hab¨ªan estado utilizando de forma indistinta la habitaci¨®n que hab¨ªan realquilado a un modelo de pasarela en la calle de las Infantas y el piso de dos dormitorios arrendado hace m¨¢s de un a?o en la calle de Augusto Figueroa. Sobre esa zona se hab¨ªa desplegado un fuerte dispositivo policial tanto para mantenerlas bajo seguimiento como con motivo de la operaci¨®n especial puesta en marcha ante la amenaza continua de ETA sobre Madrid.

Las dos supuestas terroristas debieron de sentir que estaban siendo vigiladas, seg¨²n asegur¨® ayer el ministro del Interior, Jaime Mayor. "Creyeron que el operativo policial estaba ya muy cerca de ellas", dijo. Las fuentes consultadas indican que una de las dos mujeres llam¨® a la Telef¨®nica para conocer el n¨²mero de la Embajada de Cuba. Acto seguido, telefonearon a la propia sede diplom¨¢tica para conocer su situaci¨®n exacta, ya que ambas "apenas conoc¨ªan Madrid porque acababan de llegar del Pa¨ªs Vasco o del sur de Francia", seg¨²n las citadas fuentes.

Estos medios a?adieron que las dos mujeres tomaron un taxi en el centro de Madrid y pidieron que las llevara hasta el paseo de La Habana, donde se encuentra la Embajada de Cuba.

El ministro consejero de Cuba en Espa?a, Juan Astiazar¨¢n, asegur¨® a la agencia Efe que Ainara Ester¨¢n y Nerea Garro entraron "por la cerca" del edificio, lo que motiv¨® que los trabajadores de la embajada llamaran inmediatamente al 091.

Mayor confirm¨® que fue la propia Embajada la que telefone¨® a la polic¨ªa y la que comunic¨® que en sus oficinas se encontraban dos ciudadanas vascas que hab¨ªan acudido "a pedir asilo pol¨ªtico o acogida en la embajada". Los diplom¨¢ticos cubanos se negaron a concederles ninguna de las dos posibilidades planteadas e insistieron en que deb¨ªan marcharse.

Para ese momento ya se hab¨ªa montado un dispositivo policial en los alrededores de la embajada, que se encuentra muy cerca de unas dependencias del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa. El ministro consejero afirm¨® que los responsables que se encontraban en aquel momento, sobre las 20.30 del lunes, en la Embajada pidieron finalmente a las dos mujeres que abandonaran su sede, a lo que no opusieron resistencia.

No obstante, un ¨²ltimo obst¨¢culo dificult¨® su salida de la embajada. Un veh¨ªculo Z de la polic¨ªa se estacion¨® en la puerta del edificio, lo que hizo que amba mujeres se dieran la media vuelta. Los diplom¨¢ticos cubanos hicieron una nueva gesti¨®n y lograron que el coche se retirara. Finalmente, ambas salieron "voluntariamente", seg¨²n Astiazaran, y fueron detenidas por la polic¨ªa.

Aristiazar¨¢n asegur¨® que la legaci¨®n diplom¨¢tica se puso en contacto con su Ministerio de Exteriores al finalizar el incidente para que estuviera informado. Al ser preguntado sobre si las dos presuntas etarras solicitaron asilo, se limit¨® a decir: "Igual que queremos que nos respeten aqu¨ª, nosotros tenemos tambi¨¦n que respetar". Mayor, que agradeci¨® la actuaci¨®n cubana, confirm¨® que lo pidieron.