Caruana echa un pulso a Londres sobre el submarino nuclear para obtener m¨¢s poder para Gibraltar
Reacci¨®n sindical
Con el comunicado que public¨® el martes amenazando al Gobierno brit¨¢nico con prohibir la reparaci¨®n del submarino nuclear Tirelees, el ministro principal de Gibraltar, Peter Caruana, intenta ante todo echar un pulso a Londres para arrancar m¨¢s poderes para el Ejecutivo de la colonia, que ¨¦l encabeza.?sta es la sospecha que comparten las diplomacias espa?ola y brit¨¢nica ahora que Gibraltar est¨¢ dando los primeros pasos para negociar con Londres una nueva Constituci¨®n que sustituya a la de 1969, seg¨²n indican fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Molesto por la visita que hicieron al buque, el viernes, dos t¨¦cnicos nucleares espa?oles, Caruana advirti¨® hace tres d¨ªas de que no autorizar¨¢ la reparaci¨®n del sumergible si los cuatro expertos en seguridad at¨®mica que ha contratado para disponer de una evaluaci¨®n propia piden ver el reactor y les es denegado el acceso.
El Ministerio de Defensa brit¨¢nico reaccion¨® anteayer con otro comunicado en el que anticipaba que esos expertos no ver¨ªan el reactor porque "no es necesario (...) proporcionales el acceso para que puedan evaluar la seguridad del m¨¦todo de reparaci¨®n".
Detr¨¢s de esta pugna entre Gibraltar y su metr¨®poli se esconde el empe?o de Caruana de impedir una nueva visita al Pe?¨®n de representantes del Consejo de Seguridad Nuclear espa?ol pero tambi¨¦n un intento de obtener concesiones de Londres.
Despu¨¦s de las ¨²ltimas elecciones en Gibraltar, en febrero, se ha empezado a reunir una comisi¨®n integrada por Caruana, dos de sus ministros y los jefes de los partidos socialista y liberal para consensuar una propuesta de nueva Constituci¨®n para negociar con el Foreign Office.
La propuesta no est¨¢ todav¨ªa redactada pero todos los miembros de la comisi¨®n, sobre todo los representantes de la oposici¨®n, quieren que Gibraltar goce de un mayor autogobierno y que los poderes del gobernador sean recortados.
Caruana ha viajado a Londres para ir sondeando sobre estas ideas al Foreign Office que las ha acogido con frialdad por temor a la reacci¨®n adversa de Madrid. El Gobierno espa?ol, que intent¨® en vano ser consultado sobre la elaboraci¨®n de la nueva Constituci¨®n gibraltare?a, teme que la propuesta suponga un paso hacia la independencia.
Teoricamente Caruana no es competente para vetar la reparaci¨®n del submarino pero fuentes brit¨¢nicas reconocen que, si se pronuncia p¨²blicamente en contra, ser¨¢ muy dif¨ªcil llevarla a cabo por razones pol¨ªticas e incluso t¨¦cnicas. El TGWU, el sindicato que reagrupa a cientos de civiles gibraltare?os que trabajan para el Ministerio de Defensa brit¨¢nico, se ha declarado en contra de que el Tireless se arregle en el Pe?¨®n.Laboristas y liberales, que componen la oposici¨®n a Caruana, le exig¨ªan de nuevo ayer al ministro principal en un comunicado que el sumergible "sea llevado fuera de Gibraltar cuanto antes y reparado en alg¨²n otro lugar (...)". No s¨®lo lo piden por razones de seguridad sino porque, afirman, "es el mejor camino para evitar visitas o interferencias espa?olas con lo que sucede en Gibraltar".
La oposici¨®n gibraltare?a se inclina ahora por pensar que Caruana acabar¨¢ declarando al submarino "objeto non grato". La prensa local empieza a pensar lo mismo. "Las ¨²ltimas indicaciones apuntan a que el Gobierno de Gibraltar ha cambiado de opini¨®n sobre la reparaci¨®n aunque todav¨ªa no ha anunciado su decisi¨®n p¨²blicamente", se?alaba la publicaci¨®n Iberianews.
Si as¨ª es, concluye Iberianews, "la poblaci¨®n se expondr¨¢ a lo que algunos han llamado una crisis constitucional que, por primera vez, enfrentar¨¢ a la autoridad gibraltare?a con el Gobierno brit¨¢nico".
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