Dos bases legales opuestas
No existen precedentes de una repetici¨®n electoral. Ning¨²n funcionario del Estado de Florida ten¨ªa anoche una respuesta clara. Oficialmente, la responsabilidad ¨²ltima recae sobre el gobernador Jeb Bush, con el visto bueno del Legislativo local, pero las demandas legales pueden dejar en suspenso esa v¨ªa. Si la pol¨¦mica de las 22.400 papeletas de Palm Beach se dirime en los tribunales, la elecci¨®n del pr¨®ximo presidente entrar¨ªa en un laberinto judicial imposible de predecir. Primero deber¨ªan emitir sentencia los tribunales de circuito, los de apelaci¨®n y el Supremo de Florida. Esta v¨ªa local no excluye la federal, en cuyo caso se podr¨ªa llegar al Supremo de EE UU.
En este segundo escenario preocupa el tiempo. Por r¨¢pido que fuera ese proceso legal, llevar¨ªa semanas o meses y la Constituci¨®n de Estados Unidos prev¨¦ una entrega del poder el 20 de enero de 2001.
El ex secretario de Estado James Baker, enviado de George W. Bush como observador del proceso de Florida, afirm¨® ayer que la validez de las papeletas de Palm Beach es incuestionable: "Los dos partidos las aprobaron y se publicaron en varios peri¨®dicos, por lo que los votantes tuvieron suficiente tiempo de haber pedido un cambio y no lo hicieron", dijo ayer en Tallahassee. ?sa es la base legal de los republicanos.
Varios expertos aseguraron anoche que la de los dem¨®cratas es otra: la papeleta no cumple con los requisitos legales de un memorando de la secretaria de Estado de Florida, Katherine Harris, en el que se indicaba el orden de los candidatos: primero republicanos y despu¨¦s los dem¨®cratas, siguiendo as¨ª el orden de las ¨²ltimas elecciones a gobernador. El segundo c¨ªrculo de la papeleta no correspond¨ªa a Gore sino a Buchanan.
De llegarse a celebrar otra elecci¨®n en el condado, que es foco principal de la controversia, s¨®lo podr¨ªan participar los votantes que lo hicieron en la primera. En total hubo 273.000 sufragios en Palm Beach.
La diferencia del resultado final puede ser considerable, porque se trata de un ¨¢rea hist¨®ricamente dem¨®crata.
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