El Bar?a revive la pesadilla amarilla

El Villarreal tiene en el Camp Nou una mina: gan¨® hace dos a?os colocando a Van Gaal al borde del despido y ayer repiti¨® la proeza. La grada destil¨® ira y se ensa?¨® con el ¨¢rbitro, que se?al¨® al final un penalti y luego se desdijo a instancias del linier, que acert¨® en su decisi¨®n. Salieron pa?uelos para el colegiado pero fue la expresi¨®n de la impotencia que sinti¨® la hinchada. El Bar?a se empe?¨® en repetir su antigua c¨¢mara de los horrores: salir de Europa por la puerta falsa y ser derrotado por un equipo al que le bast¨® el sentido com¨²n, el orden y los goles de V¨ªctor. Todo lo que no tuvo el Barcelona, que estuvo perdido, ca¨®tico y sin gol. S¨®lo marc¨® Cocu a bal¨®n parado. No fue extra?o: los azulgrana hab¨ªan sobrevivido gracias a Rivaldo y el brasile?o est¨¢ con su selecci¨®n.Europa convirti¨® al Bar?a en un animal herido y el Villarreal, alentado por su propia historia, que se ver¨¢ hasta en el cine, se encarg¨® pronto de decirlo. Su gol fue mete¨®rico: no hab¨ªan transcurrido ni 20 segundos cuando el bal¨®n corr¨ªa por el c¨ªrculo central, Puyol resbal¨® y V¨ªctor encar¨® a Arnau y marc¨®. El Camp Nou se qued¨® perplejo ante la repetici¨®n de la insolencia y de golpe volvieron las im¨¢genes del pasado, de los goles de Craioveanu y de la gesta. El ¨²nico consuelo es que el gol lleg¨® muy temprano y aparentemente el Bar?a ten¨ªa tiempo suficiente para reaccionar.

El Villarreal dej¨® en evidencia todas las carencias del Bar?a. No estaba Rivaldo y ya se sabe que sin ¨¦l los azulgrana se quedan secos. Xavi intentaba maniobrar enviando balones a Kluivert, muy marcado y buscando el centro de Simao. A Alfonso, otro d¨ªa m¨¢s, ni se le vio. Sin marcar el tiempo de juego, el Bar?a s¨®lo transmit¨ªa rabia y el Villarreal replic¨® con dureza. Sus centrales acabaron amonestados. Fue excesivo porque el Bar?a s¨®lo se acerc¨® con un disparo a bocajarro de Xavi y en el momento del gol. El mediocentro sac¨® una falta y Cocu, de espaldas cabece¨® a gol. Otra vez un tanto a bal¨®n parado. El recurso m¨¢s utilizado por el Bar?a para sobrevivir.

Parec¨ªa que el empate serenar¨ªa los ¨¢nimos pero s¨®lo sirvi¨® para ahondar en la impotencia. El Bar?a sigui¨® perdido: estrell¨¢ndose ante el orden posicional del Villarreal. E ineficaz ante puerta: Alfonso, a porter¨ªa vac¨ªa, cabece¨® fuera y Sergi y Luis Enrique se estorbaron para marcar. El Villarreal, vista tanta inoperancia, se fue hacia arriba y Xavi impuls¨® un par de contraataques. El mundo al rev¨¦s.

No hac¨ªa predecir nada bueno el partido. El Bar?a arranc¨® en la segunda parte igual de confuso. Ni lleg¨® a puerta. Ni se acerc¨®. No hubo m¨¢s de seis remates. El Villarreal fue creciendo hasta que V¨ªctor recibi¨® un bal¨®n en el ¨¢rea que, tras un rechace de Petit, le lleg¨® a los pies: toc¨® y describi¨® una par¨¢bola preciosa, delicada, que se col¨® por la escuadra. Serra Ferrer hizo un cambio cantado: sustituy¨® a Alfonso por Dani. Y otro extra?¨ªsimo: quit¨® a Puyol, apost¨® por Gerard y coloc¨® a Xavi de lateral. El desconcierto fue inmenso. Tuvo suerte el Bar?a porque Marioni y Craioveanu pudieron agrandar el siete. El ¨¢rbitro tampoco fue ajeno a los nervios: pint¨® un festival de tarjetas y se convirti¨® en la cabeza de turco ideal para la grada: pit¨® penalti por manos de Berruet a disparo de Dani y despu¨¦s corrigi¨® el error a instancias del linier. El Bar?a revivi¨® su pesadilla amarilla.