Los equipos de rescate recuperan 66 cad¨¢veres mientras se paralizan los funiculares en Austria

Con enormes dificultades, las unidades de rescate consiguieron ayer extraer del t¨²nel de Kitzsteinhorn los cuerpos de 66 de las v¨ªctimas del incendio del funicular que cost¨® la vida de al menos 159 personas. Seg¨²n los m¨¦dicos forenses, se tardar¨¢n unas tres o cuatro semanas en identificar los restos, carbonizados e irreconocibles. Las causas de la mayor cat¨¢strofe de los Alpes austriacos sigue siendo un enigma. En todo el pa¨ªs se suspendi¨® el funcionamiento de todos los dem¨¢s funiculares de construcci¨®n similar a la de este metro alpino que llevaba el nombre de Drag¨®n Glaciar.

Ex¨¢menes de ADN

Entre los 159 muertos registrados hay 92 austriacos, 37 alemanes, un brit¨¢nico, diez japoneses, cuatro eslovenos, dos holandeses, un checo, ocho estadounidenses y cuatro de nacionalidad desconocida. Sigue habiendo un 10% de margen de inseguridad en estas identificaciones, que se hacen por deducci¨®n y testimonio, ya que resulta imposible reconocer a las v¨ªctimas. El domingo, el viento c¨¢lido trajo el buen tiempo al lado norte de los Alpes, pero dificult¨® los vuelos de los helic¨®pteros para transportar los cad¨¢veres a la cl¨ªnica forense de Salzburgo. Los equipos, formados por un centenar de soldados del Ej¨¦rcito austriaco, bomberos voluntarios, t¨¦cnicos, gendarmes, m¨¦dicos forenses y crimin¨®logos, estuvieron trabajando sin parar noche y d¨ªa, turn¨¢ndose cada hora y media para poder soportar los tremendos esfuerzos. Entraban en peque?os grupos de tres o cuatro en la estrecha galer¨ªa del t¨²nel, de s¨®lo 3,6 metros de ancho. Para llegar hasta el vag¨®n, convertido en un esqueleto de aluminio derretido, tardaban unos 15 minutos, abri¨¦ndose paso "a trav¨¦s de monta?as de cad¨¢veres", seg¨²n comentaba uno de los soldados. Hay montones de cuerpos fundidos, que no permiten diferenciar d¨®nde empieza uno y acaba otro. Con temperaturas de m¨¢s de 1.000 grados cent¨ªgrados, el t¨²nel se convirti¨® en un verdadero crematorio.A las dos de la tarde se inform¨® de que los equipos de rescate consiguieron penetrar en el t¨²nel por la entrada inferior, que hasta ese momento hab¨ªan evitado por el riesgo de que lo que quedaba del veh¨ªculo se precipitara monta?a abajo. Pero, superados unos inconvenientes, aparecen otros. A ra¨ªz del extremo calor en el interior del t¨²nel se desestabiliz¨® la construcci¨®n y los integrantes de los equipos de socorro corr¨ªan peligro de perecer bajo desprendimientos. "Para evitar m¨¢s cat¨¢strofes tuvimos que sacar entre tres y cuatro toneladas de piedras", dijo un ge¨®logo del equipo. Los soldados, respaldados por crimin¨®logos y m¨¦dicos forenses, act¨²an con una cierta lentitud y sobre todo precauci¨®n para no destruir ninguna pista que pueda ser ¨²til a la identificaci¨®n.

El domingo, las autoridades hab¨ªan anunciado que los restos de las v¨ªctimas reconocibles a la vista se depositar¨ªan en un pabell¨®n en la localidad de Kaprun para que pudieran ser identificados por sus familiares. Tras constatar lo poco que qued¨® de los pasajeros se advirti¨® de que todos ser¨ªan trasladados a la cl¨ªnica forense de Salzburgo para que sean sometidos a un examen gen¨¦tico de ADN. "Ninguno se identifica a la vista. A consecuencia de la fundici¨®n de los tejidos sint¨¦ticos y de las alt¨ªsimas temperaturas han desaparecido todos los rasgos de los rostros", explic¨® un forense. Los tres equipos de m¨¦dicos solicitan a los familiares que aporten objetos personales de los desaparecidos, como hojas de afeitar o cepillos de dientes.