Radiaciones en el SAS

Es muy probable que si a los t¨¦cnicos del Consejo de Seguridad Nuclear que visitaron el submarino nuclear anclado en Gibraltar les ofrecieran la posibilidad de volver a visitarlo acompa?ados de sus hijos peque?os y familiares, lo hiciesen. Estoy casi convencido de que si esa oportunidad se la diesen a los miembros m¨¢s activos de la plataforma antisubmarino, al presidente Chaves o cualquier pol¨ªtico de turno interesado en este tema, tambi¨¦n lo har¨ªan.Todos ellos saben que el peligro del submarino es mucho m¨¢s potencial que real; qye es preligroso si se producen cambios, fisuras, fugas o problemas en el reactor y que, mientras eso no ocurra, las visitas tur¨ªsticas, oficiales o de investigaci¨®n no entra?an peligro alguno. No obstante, ah¨ª est¨¢ la lucha para que el Tireless se marche. De lo que s¨ª estoy plenamente convencido es de que ni unos ni otros consentir¨ªan jam¨¢s que a alguno de sus familiares le hiciese una exploraci¨®n radiol¨®gica un profesional que, seg¨²n las propias autoridades sanitarias de este pa¨ªs, no est¨¢ ni habilitado legalmente ni capacitado profesionalmente para ello. Pues bien, hay que informarles a todos ellos de que, en la mayor¨ªa de los casos sin saberlo, est¨¢n "consintiendo" que esta situaci¨®n se produzca.

Y digo en la mayor¨ªa de los casos y no en todos, porque los t¨¦cnicos del Consejo de Seguridad Nuclear conocen perfectamente esta anomal¨ªa, ilegalidad o responsabilidad del Servicio Andaluz de Salud (SAS) porque se lleva muchos a?os denunci¨¢ndolo. Y Chaves, y los m¨¢ximos responsables del SAS, y los directores gerentes y de Enfermer¨ªa de los hospitales del SAS, tambi¨¦n lo saben.

Pero los integrantes de la plataforma antisubmarino en particular, y los usuarios de los hospitales p¨²blicos en general, es posible que ignoren que, en muchos cassos, cuando son atendidos en un Servicio de Radiolog¨ªa de muchos de los hospitales del SAS, la persona que maneja los aparatos productores de radiaciones ionizantes no deber¨ªa, ni legal ni profesionalmente, hacerlo.

Eso es un peligro real, no potencial. Ah¨ª se produce un contacto directo con las radiaciones ionizantes, bajo la responsabilidad directa, aunque no ¨²ltima, de un profesional al que el propio sistema sanitario considera incompetente para realizar esa tarea pero al que, al mismo tiempo, mantiene en su puesto por presiones sindicales. En cualquer visita a la mayor¨ªa de los hospitales andaluces podr¨¢n comprobar, en m¨¢s de un caso, la presencia en los servicios de Radiolog¨ªa, manejando aparatos productores de radiaciones, de ATS sin especialidad y auxiliares de Enfermer¨ªa (posteriores a 1984), e incluso alg¨²n hospital en que las exploraciones radiol¨®gicas intraoperatorias, es decir, en el quir¨®fano, las realiza un celador, pese a que tan s¨®lo los T¨¦cnicos Especialistas en Radiodiagn¨®stico (TER) y los ATS con la correspondiente especialidad pueden manejar dichos aparatos, adem¨¢s de los facultativos autorizados para ello.

La diferencia entre denunciar una u otra situaci¨®n es que la del submarino "vende" pol¨ªticamente mucho y la del personal cualificado en los Servicios de Apoyo al Diagn¨®stico y Tratamiento de los hospitales (Radiolog¨ªa y Laboratorio) supone un claro enfrentamiento con el sindicato de Enfermer¨ªa, lo cual ya no resulta tan "interesante".- Mariano S¨¢nchez Robles. Motril (Granada)