Adriana y Elena, ante los 'flashes'
La fallera infantil, Elena Nebot Collado, no recuerda la primera vez que pis¨® el casal de su falla, Burjassot-Padre Carbonell. "Desde que nac¨ª he sido fallera", se?alaba con orgullo poco despu¨¦s de conocer, rodeada de su familia, que hab¨ªa sido elegida entre 13 aspirantes.Esta valencianohablante de 11 a?os vecina del barrio de Benicalap se mostraba ayer encantada atendiendo el asedio de las preguntas de rigor que realizaban los medios de comunicaci¨®n, en medio de una tormenta de flashes. "?Cual es tu acto preferido?", "la ofrenda a la Virgen"; "?qu¨¦ es lo m¨¢s importante del cargo?", "representar muy bien a Valencia", se?alaba ajust¨¢ndose perfectamente a un gui¨®n que la acompa?ar¨¢ a lo largo de los pr¨®ximos 12 meses. Pero tampoco dej¨® de lado la naturalidad, al marcarse un objetivo l¨²dico para su reinado, el de pasarlo "muy bien" como fallera mayor infantil.
Ma?ana, volver¨¢ a su clase de sexto de primaria en el Colegio de Nuestra Se?ora del Carmen de San Vicente de Paul, donde experimentar¨¢ una nueva sesi¨®n de felicitaciones que, probablemente contin¨²en cuando acuda a practicar sus deportes favoritos, la nataci¨®n y la gimnasia r¨ªtmica. Aunque, probablemente, sepa que tendr¨¢ que dejar estas aficiones un poco de lado ante el alud de actos que se le vienen encima.
Adem¨¢s de la alcaldesa de Valencia, Rita Barber¨¢, tradicional encargada de comunicarles su elecci¨®n, el presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, fue uno de los primeros en felicitar a las falleras, a trav¨¦s de una conexi¨®n en directo de la Cadena SER. "Seguro que la elecci¨®n ha sido acertada", dijo el presidente del Consell, quien destac¨® "lo importante que os ha sucedido hoy en vuestra vida".
"Xiqueta, es la vida. Qui¨¦n me iba a decir que iban a entrevistarme los de la tele". Pepita Climent, la abuela materna de la fallera mayor, Adriana Polo Escrich, estaba tan emocionada que mientras el encargado de entregar el ramo enviado por el presidente de la Generalitat le daba una nota ella le dec¨ªa: "hijo, no me entrevist¨¦is m¨¢s, que ya he hablado para la tele".
Y al otro lado del sal¨®n comedor, Adriana, de estreno, con vestido azul verdoso (aunque ella dice que su color preferido es el rojo) inspirado en la l¨ªnea m¨¢s sobria de Armani pero en el que podr¨ªan haber metido mano Vittorio y Lucchino, aguantaba estoica y luciendo sonrisa a los encargados de inmortalizar el solemne 20-N en la vida de esta joven de 18 a?os.
Tal vez sea la experiencia. Adriana ya sabore¨® el glamour cuando hace diez a?os form¨® parte de la corte de la fallera infantil. "Pero ahora es otra cosa. Entonces era muy peque?a y hay cosas de las que no me acuerdo". Desde entonces hasta ahora, Adriana ha seguido suspirando por su falla de Rep¨²blica Argentina-Doctor. Pallar¨¦s (de la que fue fundador su abuelo paterno), ha llegado hasta COU -quiere estudiar Administraci¨®n y Direcci¨®n de Empresa-, se ha convertido en casi una profesional del aerobic (aunque una lesi¨®n de espalda le impide seguir practicando desde hace algunos meses) y se ha echado novio, un estudiante de imagen y sonido.
Miguel ?ngel, su padre, director del departamento de infom¨¢tica de una empresa valenciana, y Mar¨ªa Amparo, su madre, dedicada a sus labores, atend¨ªan embargados por la emoci¨®n a vecinos, amigos, falleros y familiares con un mil veces repetido "?qu¨¦ emoci¨®n, no nos lo podemos creer!.
Y por todas las dependencias de la casa, con gritos desde la calle de Adriana, Adriana, Adriana, se colaban gentes que quer¨ªan ver a la joven y compartir con cava y pastelitos el ilustre nombramiento. Al peque?o de la casa, el hermano de la fallera, no se le vio el pelo. Testigo de su existencia, una foto con Adriana vestida de fallera, en los tiempos en que a¨²n era morena.
Superado el trance de las primeras declaraciones, cuando ya las piernas le hab¨ªan dejado de temblar, Adriana sali¨® al balc¨®n a saludar. L¨¢grimas en los ojos, v¨ªtores y piropos como aperitivo de lo que vendr¨¢.
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