T¨¦cnicos y sindicatos piden m¨¢s controles en Espa?a

Vigilancia interna

En Espa?a no se ha detectado todav¨ªa ning¨²n caso de encefalopat¨ªa espongiforme bovina (EEB). Sin embargo, t¨¦cnicos comunitarios y sindicatos de ganaderos espa?oles aseguran que los controles practicados en nuestro pa¨ªs son insuficientes tanto en n¨²mero como en precisi¨®n.Desde que fueran detectados los primeros casos en el Reino Unido a finales de los ochenta, Espa?a tom¨® medidas para evitar el consumo de las carnes contaminadas -prohibiendo su importaci¨®n desde los pa¨ªses afectados- y para impedir la infecci¨®n de nuestras reses, cerrando las fronteras a piensos sospechosos de transmitir la enfermedad. Desde mayo de 1999, Sanidad y Consumo prohibi¨®, asimismo, la entrada de intestinos, bazos, cr¨¢neos, ojos, am¨ªgdalas, m¨¦dula espinal y columna vertebral de bovinos, ovinos y caprinos.

En cuanto al control de los animales vivos, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentaci¨®n promulg¨® diversas normas a partir de 1996 para impedir que el pri¨®n, agente causal de la enfermedad, circulara entre nuestras reses a trav¨¦s de los piensos. Como medida preventiva, prohibi¨® la entrada de prote¨ªnas de mam¨ªferos, de harinas de carne y de hueso, y de piensos compuestos por estos productos procedentes de pa¨ªses con casos de EEB.

A estas medidas, Agricultura a?adi¨® la vigilancia interna practicando an¨¢lisis espec¨ªficos en animales con sintomatolog¨ªas nerviosas y an¨¢lisis del cerebro de reses sacrificadas, f¨®rmula infalible para detectar el mal. Asimismo, regul¨® el reciclado de los subproductos animales y la fabricaci¨®n de piensos. Estas medidas se coordinan a nivel nacional desde 1997 a trav¨¦s de un programa en el que participan las direcciones generales de Ganader¨ªa y Alimentaci¨®n, el Ministerio de Sanidad y Consumo, y los respectivos servicios de las distintas autonom¨ªas.Pese a estas normas, una inspecci¨®n practicada por t¨¦cnicos de la UE en Galicia y Cantabria, el pasado abril, destaca que las muestras llevadas a cabo en ambas regiones son insuficientes en n¨²mero y no se extienden, como ser¨ªa preciso, a animales con s¨ªntomas sospechosos como par¨¢lisis y alteraciones nerviosas.

El estudio comunitario denuncia la falta de instrucciones precisas en los cursos dirigidos a veterinarios y t¨¦cnicos de mataderos. Esta cr¨ªtica fue apoyada por el secretario general de la Uni¨®n de Peque?os Agricultores y Ganaderos (UPA), Fernando Moraleda, quien subray¨® la escasez de laboratorios de an¨¢lisis en Espa?a y la diferencia entre las 48.000 muestras de detecci¨®n de la EEB que practica Francia al a?o en el vacuno y las 700 de Espa?a, informa Efe.