Los palestinos buscan un nuevo mediador

Yasir Arafat busca un nuevo mediador en su conflicto con los israel¨ªes. La operaci¨®n responde a una maniobra diplom¨¢tica del presidente palestino, pero tambi¨¦n a una exigencia de la calle, que reclama romper el monopolio de los norteamericanos. El cambio, aparentemente, es simple, pero se olvidan de algo muy importante, y es que, para el Gobierno israel¨ª, el ¨²nico mediador aceptado es la Casa Blanca. "Todo lo dem¨¢s" supone convertir el problema en una "verbena", seg¨²n defini¨® recientemente el ministro de Exteriores, Slomo Ben Ami.Pero en el caso hipot¨¦tico de que las dos partes se pusieran de acuerdo y Rusia ocupara el lugar de EE UU, o bien se llegara a una f¨®rmula mixta de mediaci¨®n, no cambiar¨ªan las cosas; no est¨¢ en discusi¨®n el arbitraje. El problema principal en estos momentos es erradicar el tipo de violencia que se ha incrustado en los territorios ocupados e Israel. La Intifada se va desvaneciendo, ya no hay pr¨¢cticamente movilizaciones populares y en su lugar aparecen por ambos lados sistemas de lucha m¨¢s dif¨ªciles de ver y controlar, como el terrorismo y las ejecuciones sumarias.

Los ¨²ltimos resultados oficiosos aseguran que en los ¨²ltimos d¨ªas Israel se ha deshecho de al menos tres dirigentes radicales palestinos con m¨¦todos poco limpios, pero efectivos, y, sobre todo, sin c¨¢maras de la televisi¨®n internacional. El ¨²ltimo en caer fue un dirigente de la milicia Tanzim de Jenin, abatido cuando se encontraba en su casa por un misil disparado desde un helic¨®ptero.

Por parte palestina, los m¨¦todos son igual de sucios. A diario se suceden los atentados contra autobuses o coches privados en las carreteras del pa¨ªs, acciones que pasan inadvertidas y de las que los medios de informaci¨®n han dejado de dar cuenta por una raz¨®n muy sencilla: no hay muertos. Pero son pruebas evidentes de que la Intifada ha entrado en un nuevo estadio. Lo m¨¢s inquietante vendr¨¢ la pr¨®xima semana, cuando se inicie el Ramad¨¢n y los combatientes palestinos a?adan por esa raz¨®n a su guerra santa un plus de contundencia.