El Tratado de Niza no incluir¨¢ la Carta de Derechos de la UE

Las discrepancias ante la pr¨®xima cumbre europea de Niza crecen d¨ªa tras d¨ªa. El protagonismo correspondi¨® ayer al Parlamento Europeo, que se mostr¨® indignado tras ser informado por el ministro franc¨¦s de Exteriores, Hubert V¨¦drine, de que el pr¨®ximo Tratado de la Uni¨®n no incluir¨¢ referencia alguna a la Carta de Derechos Fundamentales de la UE porque esa posibilidad es "rechazada con firmeza" por algunos Gobiernos. "Lo siento, pero las cosas son como son", coment¨® V¨¦drine ante el malestar de los l¨ªderes de la Euroc¨¢mara.

Sin alcance jur¨ªdico

Algunos dirigentes de los grupos parlamentarios amenazaron veladamente con votar contra el futuro nuevo Tratado, tanto por la discrepancia sobre la Carta como por el hecho de que, como tambi¨¦n explic¨® V¨¦drine, parece inevitable que algunos temas importantes seguir¨¢n decidi¨¦ndose por unanimidad en el Consejo de Ministros de la UE, y no por mayor¨ªa cualificada como exigen la Comisi¨®n Europea, el propio Parlamento y varios Gobiernos de la UE.El Parlamento es partidario de que la Carta, que recoge una serie de principios b¨¢sicos comunes para los ciudadanos europeos, se incorpore al nuevo Tratado o, al menos, que en el mismo se incluya una referencia a ese documento. V¨¦drine, sin embargo, fue ayer rotundo ante la Euroc¨¢mara y asegur¨® que en Niza simplemente habr¨¢ una "proclamaci¨®n" de la Carta, con lo que, en principio, no tendr¨¢ fuerza jur¨ªdica en la Uni¨®n.

"No debiera ser s¨®lo proclamada, sino que debiera quedar anclada a los tratados", afirm¨® el presidente del Grupo Popular, el alem¨¢n Hans-Gert Poettering. Para Enrique Bar¨®n, que habl¨® en nombre de los socialistas, la pretensi¨®n del Parlamento es "absolutamente clave", por lo que consider¨® "inaceptable" que los jefes de Estado o de Gobierno se limiten a proclamarla. Bar¨®n advirti¨® de que las conclusiones de Niza ser¨¢n votadas posteriormente en el Parlamento y que a los eurodiputados les costar¨¢ respaldar un nuevo Tratado "si la Carta queda en la papelera".

En similares t¨¦rminos se expresaron Pat Cox, por parte de los liberales, y Heidi Hautala, por Los Verdes. El dirigente popular ??igo M¨¦ndez de Vigo, presidente del grupo de eurodiputados que particip¨® en la redacci¨®n de la Carta, dijo: "No hay explicaci¨®n posible" a la actitud de los l¨ªderes europeos, y agreg¨® que no evitar¨¢ "la tentaci¨®n de votar contra el nuevo Tratado" si no hay avances en los asuntos que deben ser aprobados por mayor¨ªa cualificada y en el encaje de la Carta.

Pero V¨¦drine se mostr¨® inflexible y se?al¨® que el alcance jur¨ªdico de la Carta ser¨¢ objeto de amplios debates, pero siempre despu¨¦s de la cumbre de Niza. Liderados por el Reino Unido, se oponen a la inclusi¨®n de la Carta en el Tratado Irlanda, Suecia, Dinamarca y Holanda.V¨¦drine tambi¨¦n inform¨® al Parlamento de que, a s¨®lo una semana de la cumbre de Niza, s¨®lo hay acuerdo para que 40 de los 70 asuntos que hoy deben ser aprobados por unanimidad en el Consejo de Ministros sean aprobados en el futuro por mayor¨ªa. "Hay problemas serios", reconoci¨® el ministro franc¨¦s. El presidente de la Comisi¨®n, Romano Prodi, quien tambi¨¦n intervino ante el pleno del Parlamento, se mostr¨® partidario de acabar con la cultura del veto en todos los terrenos. En su opini¨®n, esa cultura puede provocar una aut¨¦ntica "par¨¢lisis" en la UE cuando en la Uni¨®n haya 27 Estados, todos ellos con derechos a veto en cap¨ªtulos tan importantes como la fiscalidad, la pol¨ªtica social, la cohesi¨®n, la inmigraci¨®n o la pol¨ªtica comercial.

El primer ministro italiano, Giuliano Amato, de visita en Bruselas, hab¨ªa destacado antes que su pa¨ªs es el ¨²nico de los grandes (junto a Alemania, Reino Unido, Francia y Espa?a) que no se opone a que en esos cinco cap¨ªtulos se adopten decisiones por mayor¨ªa.

Francia, pa¨ªs que preside este semestre la UE, se opone a dar ese paso en pol¨ªtica comercial. "?C¨®mo puede esperar Francia que otros pa¨ªses cedan si Par¨ªs mantiene esa actitud?", pregunt¨® ayer Poettering a V¨¦drine.

Tambi¨¦n con respecto a las reformas que se deben adoptar en Niza, Amato se mostr¨® comprensivo con Espa?a al se?alar que Madrid tendr¨¢ que ser "recompensado" con m¨¢s votos en el Consejo si finalmente, como es previsible, pierde uno de los dos comisarios que tiene en la Comisi¨®n Europea. Hoy Espa?a tiene ocho votos, frente a los diez que tienen los otros cuatro grandes pa¨ªses. En Niza se aprobar¨¢ un nuevo reparto de votos por pa¨ªses como condici¨®n necesaria ante la pr¨®xima ampliaci¨®n de la Uni¨®n.