La Bolsa espa?ola se recupera y experimenta la mayor subida desde enero de 1999
Greenspan abre la puerta a un posible descenso de los tipos de inter¨¦s en Estados Unidos
Las bolsas europeas cerraron ayer con ganancias empujadas por la posibilidad de que el proceso electoral estadounidense acabe pronto y con el triunfo del candidato preferido por los inversores, el republicano George W. Bush y la sugerencia del presidente de la Reserva Federal de EE UU, Alan Greenspan, de que no habr¨¢ nuevas subidas de tipos de inter¨¦s. La Bolsa espa?ola se anot¨® la mayor subida desde enero de 1999. La Bolsa de Madrid subi¨® el 3,54% y el Ibex 35 el 4,32%. Por su parte, el ¨ªndice Nasdaq de Nueva York, en el que cotizan los valores tecnol¨®gicos, experiment¨® el mayor incremento de su historia en un d¨ªa (10,48%) y redujo sus p¨¦rdidas en lo que va de a?o a un 28,98%. El Dow Jones de valores industriales se elev¨® un 3,18%.Todas las bolsas europeas estaban muy deprimidas por las continuas ca¨ªdas de las semanas pasadas. La Bolsa espa?ola hab¨ªa ca¨ªdo el d¨ªa anterior al nivel m¨¢s bajo de este a?o. Par¨ªs gan¨® el 3,51% y volvi¨® a ganancias anuales; Francfort, un 3,40%, y Londres, el 2,28%. S¨®lo tuvo p¨¦rdidas Tokio (1,74%).
Durante la jornada, las bolsas europeas recog¨ªan beneficios tras la senda marcada el d¨ªa anterior por Nueva York. El discurso de Alan Greenspan, presidente de la Reserva Federal, del que pod¨ªa deducirse un cambio de orientaci¨®n en la pol¨ªtica monetaria, supuso que la euforia llegara a los mercados. Alan Greenspan sugiri¨® ayer que los tipos de inter¨¦s podr¨ªan reducirse en un futuro pr¨®ximo. Tras seis aumentos consecutivos, Greenspan indic¨® que la Reserva Federal estaba modificando el rumbo de la pol¨ªtica econ¨®mica y alert¨® sobre el riesgo de "un descenso excesivo en el gasto dom¨¦stico y empresarial". Esas palabras dispararon al alza los mercados.
El mensaje de Greenspan se combin¨® con las claras perspectivas de una victoria inminente del republicano George W. Bush, el candidato preferido por Wall Street por su pol¨ªtica empresarial, para desatar el optimismo. "Greenspan y las ¨²ltimas sentencias judiciales, que muestran ya el final de la incertidumbre sobre qui¨¦n ser¨¢ presidente, han sido una doble dosis de estimulante para los mercados", dijo Walt Czaicki, del Bank of America.
Tras 14 a?os dirigiendo con ¨¦xito la pol¨ªtica monetaria estadounidense, e indirectamente la de todo el mundo, Greenspan es considerado casi como un or¨¢culo infalible por los mercados. Su conferencia de ayer por la ma?ana ante un grupo de banqueros neoyorquinos era su primera comparecencia p¨²blica desde que los datos macroecon¨®micos confirmaron una desaceleraci¨®n brusca del crecimiento, y Greenspan dijo lo que los inversores quer¨ªan o¨ªr.
El presidente de la Reserva Federal confirm¨® lo obvio: que el crecimiento se hab¨ªa "moderado apreciablemente". Una vez anunciado por ¨¦l, sin embargo, el frenazo puede considerarse oficial. Con su estilo necesariamente indirecto y cargado de matices (su influencia es tal que hace un par de a?os fren¨® las bolsas por referirse de forma te¨®rica a la "exuberancia irracional" de algunos mercados), Greenspan se mostr¨® incluso preocupado ante la posibilidad de que el esperado aterrizaje suave se convierta en algo mucho peor. Su sensibilidad ante los peligros de un enfriamiento excesivo (algunos analistas ya hablan de una posible recesi¨®n en Estados Unidos) fue un b¨¢lsamo para los operadores financieros.
Durante el ¨²ltimo a?o y medio, Greenspan siempre se hab¨ªa referido a la inflaci¨®n como la amenaza m¨¢s grave. Ayer ni siquiera mencion¨® esa amenaza y, aunque sugiri¨® que tanto ¨¦l como los dem¨¢s directivos de la Reserva esperar¨ªan a disponer de "nuevos datos" sobre la desaceleraci¨®n antes de favorecer un abaratamiento del dinero, el mensaje que captaron los mercados fue precisamente que la tasa actual (6,5%) no tardar¨¢ en bajar.
La pr¨®xima reuni¨®n del Comit¨¦ Federal del Mercado Abierto, el brazo ejecutivo de la Reserva, est¨¢ prevista para el 19 de diciembre y ser¨¢ la ¨²ltima de este a?o. Se espera que se discuta la posibilidad de una reducci¨®n de tipos en enero.
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