Los candidatos exigen a los Quince que aceleren las negociaciones de adhesi¨®n

La Uni¨®n Europea se dio ayer un peque?o ba?o de ret¨®rica a favor de la "Europa reunificada" y constat¨® al mismo tiempo algunos de los problemas que vendr¨¢n con ella. La Conferencia Europea reuni¨® durante casi tres horas a los jefes de Estado o de Gobierno de los Quince con los de los 13 pa¨ªses candidatos a la adhesi¨®n, m¨¢s Suiza, invitada como observadora a petici¨®n propia. Los candidatos pusieron el acento en la necesidad de que en Niza se cierre la reforma del Tratado de ?msterdam para abrir las puertas a la adhesi¨®n de los pa¨ªses del Este y el Mediterr¨¢neo.La reuni¨®n sirvi¨® tambi¨¦n para constatar que no bastar¨¢ con los acuerdos de Niza para ajustar las instituciones comunitarias a la Europa reunificada. La treintena de l¨ªderes reunidos tuvieron sus intervenciones limitadas a un m¨¢ximo de cinco minutos cada uno, ¨²nica forma de evitar que el encuentro acabara ocupando la ma?ana entera en la agenda de la cumbre: una prueba de que el Consejo de Ministros no podr¨¢ trabajar como hasta ahora cuando haya una treintena de responsables discutiendo los asuntos del d¨ªa.

"Lo m¨¢s importante en estos casos no es tanto lo que puedes decir dentro como lo que puedes comentar en los pasillos, el fomento de las relaciones personales con los dem¨¢s colegas", reconoc¨ªa tras la reuni¨®n el ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Wladyslaw Bartoszewski.

Los Quince combinaron una cierta frialdad con c¨¢lidos c¨¢nticos a la ampliaci¨®n. Brit¨¢nicos y suecos fueron los m¨¢s entusiastas, sobre todo estos ¨²ltimos, que presidir¨¢n la UE en el pr¨®ximo semestre y har¨¢n de la ampliaci¨®n su objetivo principal.

El presidente franc¨¦s y del Consejo Europeo, Jacques Chirac, hizo votos por que la cumbre de Niza tenga ¨¦xito y la Uni¨®n est¨¦ lista a partir del 1 de enero de 2003 para recibir a los nuevos socios. Evoc¨® la reconciliaci¨®n franco-alemana tras la guerra como germen de la Europa de los Seis, y compar¨® ese momento con la ca¨ªda del Muro, primer paso hacia "la reuni¨®n de la familia europea". "La ampliaci¨®n es una obligaci¨®n pol¨ªtica y moral", apuntill¨® el presidente de la Comisi¨®n Europea, Romano Prodi.

El primer ministro h¨²ngaro, Viktor Orban, admiti¨®: "Si la reforma de Niza fracasa, los h¨²ngaros tendr¨¢n una decepci¨®n, pero eso no nos va a desanimar y seguiremos trabajando para realizar el objetivo de ingresar en la Uni¨®n Europea".

La reuni¨®n de la Conferencia Europea, por segunda vez desde que se inaugur¨® hace ya dos a?os en Londres, sirvi¨® para poco m¨¢s que para pronunciar hermosas palabras. Fue inventada para evitar que Turqu¨ªa se sintiera menospreciada en un momento en el que parec¨ªa imposible su acercamiento a Europa. Pero el acuerdo de Helsinki en diciembre de 1999, que le otorg¨® a Ankara el estatuto oficial de candidato a la adhesi¨®n -aunque, a diferencia de los otros 12, sigue sin empezar las negociaciones-, la ha convertido en un foro pol¨ªtico hueco, como no sea la de convertirse con el tiempo en parada y fonda de los pa¨ªses balc¨¢nicos en su camino hacia la Uni¨®n.