El PP y el PSOE se comprometen a elaborar de manera conjunta la estrategia contra ETA
El PP y el PSOE cerraron ayer el primer pacto antiterrorista de la democracia que corresponsabiliza a los dos principales partidos nacionales en la lucha contra ETA. Gobierne quien gobierne Espa?a, la banda terrorista "no extraer¨¢ de la violencia r¨¦dito pol¨ªtico alguno", seg¨²n refleja el documento. El acuerdo nace con vocaci¨®n duradera y de ampliaci¨®n a todas las fuerzas democr¨¢ticas, incluido el PNV, si "abandona el Pacto de Estella". El acuerdo, al defender la reinserci¨®n de los presos, archiva el debate sobre el cumplimiento ¨ªntegro de las penas, y abre la posibilidad de que se reedite otro pacto en Euskadi.
Participaci¨®n
Los dos partidos nacionales con posibilidades de gobernar en Espa?a han decidido unirse para plantarle cara en el terreno pol¨ªtico a ETA, en plena ofensiva de la banda, y cubrir el vac¨ªo por la ausencia de un foro de los partidos democr¨¢ticos, tras abandonar el PNV en 1998 el Pacto de Ajuria Enea. "ETA debe perder toda esperanza" de lograr ventajas pol¨ªticas de sus acciones violentas. El PP y PSOE declaran, en el pre¨¢mbulo del pacto, que el terrorismo es "un problema de Estado" y expresan su voluntad de "eliminar del ¨¢mbito de la leg¨ªtima confrontaci¨®n pol¨ªtica o electoral" entre los dos partidos "las pol¨ªticas para acabar con el terrorismo".El pacto, titulado Acuerdo por las libertades y contra el terrorismo, se fundamenta en un texto de ocho folios con un breve pre¨¢mbulo, que ofrece un diagn¨®stico de la situaci¨®n del Pa¨ªs Vasco, y diez puntos de acuerdo. En la introducci¨®n del documento se dirige un mensaje n¨ªtido al PNV, tras su deriva soberanista al abandonar el Pacto de Ajuria Enea en 1998 y suscribir el Pacto de Lizarra con otras fuerzas nacionalistas. S¨®lo se admitir¨¢ al PNV en el marco de la unidad de los partidos democr¨¢ticos para combatir a ETA si "abandona definitivamente, mediante ruptura formal, el Pacto de Estella, y los organismos creados por ¨¦ste".
El documento aclara que al PNV no se le excluye por su ideolog¨ªa sino por compartir foros con quienes apoyan o no condenan la violencia. "Cualquier proyecto pol¨ªtico, incluso aquellos que pretenden revisar el propio marco institucional, debe respetar las reglas y los procedimientos por ¨¦l establecidos", se?ala el punto 3 del acuerdo, en alusi¨®n a que el PNV puede utilizar la reforma del Estatuto y la Constituci¨®n para avanzar en sus aspiraciones, pero sin servirse de la palanca de la violencia de ETA.
Tampoco el pacto compromete a un acuerdo antes o despu¨¦s de las elecciones entre el PP y PSOE en Pa¨ªs Vasco. En el texto aparecen variadas referencias al diagn¨®stico com¨²n de populares y socialistas en la defensa de la Constituci¨®n y el Estatuto como marco de soluci¨®n a los problemas vascos, pero soslaya cualquier comentario sobre la actitud de ambos partidos ante los comicios en Euskadi.
El pacto consensuado entre socialistas y populares destaca con rotundidad que s¨®lo podr¨¢ haber acuerdos con el PNV si rompe definitivamente con el Pacto de Lizarra, con lo que cierra una v¨ªa de acuerdo poselectoral de los partidos constitucionalistas con los nacionalistas, si ¨¦stos contin¨²an dentro de la Asamblea de Electos Municipales.
La redacci¨®n del punto 3 y el pre¨¢mbulo, referidas a las relaciones con el PNV, ha sido la faceta m¨¢s controvertida de la negociaci¨®n entre el PP y PSOE. Al final, ambos partidos han quedado satisfechos. "Tras este pacto, si el PNV quiere volver a la unidad de los partidos democr¨¢ticos, tendr¨¢ que optar por la derrota de ETA", destacaban ayer los negociadores del PP. Desde las filas socialistas resaltaban la otra cara de la moneda del mismo pacto: la no condena de la ideolog¨ªa nacionalista sino tan s¨®lo de los acuerdos con quienes apoyan al terrorismo.
Una vez aclarados los destinatarios m¨¢s controvertidos del pacto, ¨¦ste tasa el alcance de la corresponsabilidad entre el PP y el PSOE, con el Gobierno al fondo, en la lucha contra ETA. El documento precisa los campos de actuaci¨®n com¨²n: las reformas legislativas; la pol¨ªtica penitenciaria, la cooperaci¨®n internacional, la movilizaci¨®n ciudadana e institucional as¨ª como "la b¨²squeda de posiciones conjuntas ante todos los acontecimientos que afecten a la pol¨ªtica antiterrorista".
El acuerdo precisa que el PP y el PSOE deben establecer "una colaboraci¨®n permanente" en lo referente a "impulsar conjuntamente las libertades y la pol¨ªtica contra el terrorismo". Para ello se compromete a crear una comisi¨®n de seguimiento del pacto que integrar¨¢n representantes del PP, PSOE y el Gobierno. Con una cl¨¢usula tan precisa, el PSOE logra un grado de corresponsabilidad in¨¦dita en la lucha contra el terrorismo en Espa?a.
Los socialistas pretenden, con ello, que su respaldo leal al Gobierno en esta cuesti¨®n de Estado se vea compensada con una participaci¨®n en sus iniciativas. El PSOE tambi¨¦n trata de evitar que el Ejecutivo abuse de iniciativas unilaterales contra ETA y les margine como, a su juicio, sucedi¨® con recientes propuestas, como la reforma legal de las medidas antiterroristas o el manifiesto contra ETA que el Gobierno present¨® en la Cumbre Iberoamericana de Panam¨¢.El pacto se detiene en un terreno que le duele especialmente a ETA: la ofensiva en el campo internacional. Y reafirma un compromiso "para reforzar nuevas iniciativas de cooperaci¨®n, singularmente con Francia y la Uni¨®n Europea" as¨ª como el mantenimiento de "una actividad informativa permanente, a escala internacional, en el ¨¢mbito de las instituciones y de las organizaciones pol¨ªticas y ciudadanas".
El documento tambi¨¦n archiva un debate pol¨ªtico abierto tras la ofensiva veraniega de ETA: la reforma de la legislaci¨®n para que los terroristas cumplan ¨ªntegramente sus penas. El pacto ofrece una respuesta progresista al riesgo de que sectores sociales respondan al terrorismo con medidas involucionistas. Deja la puerta abierta a la reinserci¨®n, aunque condicionada. "La pol¨ªtica penitenciaria contemplar¨¢ las formas de reinserci¨®n de aquellos que abandonen la organizaci¨®n terrorista y muestren actitudes inequ¨ªvocas de arrepentimiento y voluntad de resocializaci¨®n tal y como establece la Constituci¨®n".
Se completa el pacto con una apelaci¨®n a la movilizaci¨®n ciudadana como instrumento necesario para erradicar el terrorismo y el compromiso de crear una nueva y unitaria Fundaci¨®n de V¨ªctimas del Terrorismo.
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