PSOE y PP rechazan en la firma del pacto contra ETA rebajar las exigencias a los nacionalistas
Aznar, Zapatero y Arenas acuerdan no hacer concesiones en el pre¨¢mbulo del documento
Los dos principales partidos pol¨ªticos espa?oles, el PP y el PSOE, sellaron ayer un pacto para acabar con el terrorismo y que fue rubricado tambi¨¦n por el presidente del Gobierno. ETA ha asesinado ya a 21 personas desde que decidi¨® romper su tregua, hace ahora un a?o. En la ceremonia de la firma del acuerdo, que se realiz¨® en el palacio de la Moncloa, participaron dos amplias delegaciones del PP y del PSOE, encabezadas por Javier Arenas y Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, respectivamente. Ante las cr¨ªticas del PNV, el l¨ªder socialista enfatiz¨® que no va a pactar con los que "se sientan con quienes alientan y jalean el terrorismo". CiU ha rehusado unirse al PNV e IU en iniciativa alguna frente al acuerdo de populares y socialistas.
El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, firm¨® en La Moncloa el "Acuerdo por las libertades y contra el terrorismo" despu¨¦s de que lo hicieran el secretario general del PSOE, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y el del PP, Javier Arenas. Los firmantes de este pacto de Estado pidieron luego la adhesi¨®n de otras fuerzas democr¨¢ticas, aunque con la advertencia de que no est¨¢n dispuestos a modificar su pre¨¢mbulo, en el que PP y PSOE se comprometen a no alcanzar alianzas con el PNV y EA hasta que ¨¦stos rompan formalmente con la v¨ªa soberanista del Pacto de Lizarra. CiU e IU condicionan precisamente su apoyo a la eliminaci¨®n del pr¨®logo.Inmediatamente despu¨¦s de rubricar el documento contra ETA, Arenas y Zapatero llamaron a las dem¨¢s formaciones parlamentarias a adherirse a ¨¦ste. Pero ambos dejaron claro que tanto el PP como el PSOE est¨¢n dispuestos a soportar la avalancha de cr¨ªticas de los partidos excluidos de la firma -especialmente los nacionalistas e IU- sin hacer concesiones a su contenido.
Al acto de ayer asistieron las delegaciones negociadoras del PP y del PSOE al completo. Despu¨¦s, tanto Arenas como Zapatero, que comparecieron por separado ante los periodistas en los jardines de La Moncloa, insistieron en que el pre¨¢mbulo, que los nacionalistas censuran por sus exigencias al PNV para que rompa con el Pacto de Lizarra, no se modificar¨¢. S¨®lo cambiar¨ªa si lo hiciese el "escenario pol¨ªtico" del Pa¨ªs Vasco. O dicho de otro modo, si el PNV rompiese de manera formal con el Acuerdo de Lizarra.
Firmeza frente al PNV
Detr¨¢s de esta actitud de firmeza ante los nacionalistas est¨¢ la convicci¨®n de los dos partidos mayoritarios de la necesidad de este pacto bilateral. "Las dos fuerzas pol¨ªticas que pueden gobernar este pa¨ªs son PP y PSOE, y no busc¨¢bamos un pacto entre todas las fuerzas pol¨ªticas; no se nos puede reprochar que no hayamos contado con los dem¨¢s, no ten¨ªamos ninguna obligaci¨®n", dijo Zapatero en una reuni¨®n posterior en la Asociaci¨®n de Periodistas Europeos.Zapatero y Arenas insistieron en defender sin complejos la necesidad del compromiso. "Era impensable ni siquiera intentar un acuerdo entre cinco a seis partidos, tal y como est¨¢ la situaci¨®n pol¨ªtica, tras el Pacto de Lizarra. Desde este acuerdo bilateral intentaremos la unidad de los dem¨®cratas", dijo el l¨ªder socialista. Esgrimi¨® un segundo argumento: "El final de todos los procesos violentos requiere una condici¨®n indispensable: un acuerdo a fondo entre los dos principales partidos". Pero tambi¨¦n insisti¨® en que "es absolutamente necesario decir las cosas claras al PNV". El secretario general del PSOE expres¨® su malestar por una reciente afirmaci¨®n del presidente del PNV, Xabier Arzalluz, dirigida a los socialistas: "Ya vendr¨¢n". Le replic¨® que su partido defender¨¢ sus principios democr¨¢ticos y que tendr¨¢ que ser el PNV el que "venga".
Ayer fue el d¨ªa de la firma solemne del acuerdo pero tambi¨¦n fue la jornada en la que los dem¨¢s partidos tomaron conciencia de su exclusi¨®n y alzaron su voz. Arenas tampoco se retrajo y dijo que el PNV y EA firmaron el Pacto de Lizarra "con el entorno de ETA y directamente contra la Constituci¨®n y el Estatuto". Y exigi¨® al PNV que rompa formalmente con ese acuerdo.
Tampoco el l¨ªder del PSOE mostr¨® sorpresa por las cr¨ªticas y se limit¨® a explicar que "la inclusi¨®n" de CiU o del PNV en el pacto firmado ayer en La Moncloa "no formaba parte de los objetivos". El pr¨®logo del documento es el principal escollo para ambas fuerzas nacionalistas. "El pre¨¢mbulo se?ala la coincidencia de las dos principales fuerzas en el diagn¨®stico y el an¨¢lisis de la situaci¨®n pol¨ªtica de Euskadi, y deja abierta la adhesi¨®n inmediata a otras fuerzas, pero desde luego no busc¨¢bamos la reedici¨®n del Pacto de Ajuria Enea", remach¨® Zapatero.
Tampoco era objetivo del PSOE establecer este acuerdo con criterios electorales, en contra de lo que considera el PNV, que ve en ¨¦l una alianza entre el PP y el PSOE para gobernar juntos en el Pa¨ªs Vasco tras las pr¨®ximas elecciones auton¨®micas.
Zapatero lo neg¨® y adem¨¢s hizo unas consideraciones a los peneuvistas muy rotundas. "Yo no quiero que el PNV firme el pacto, ¨¦se no es el objetivo, sino que el PNV asuma el marco donde puede defender su proyecto, sus ideales, que yo respeto profundamente, aunque espero que tambi¨¦n respete los m¨ªos". La escalada verbal fue subiendo. "Yo no voy a hacer un pacto con los que se sientan con quienes alientan y jalean al terrorismo. No". "Aqu¨ª no cabe doble lenguaje; aqu¨ª no cabe pactar con quienes piensan que ETA no debe disolverse mientras quede un solo preso en la c¨¢rcel", dijo el secretario general del PSOE tomando otra frase de Arzalluz. "?S¨®lo faltar¨ªa que yo pactara con los que rechazan que puedan votar los ciudadanos que llevan veinte a?os trabajando en Altos Hornos de Vizcaya"!, continu¨® en referencia a las limitaciones al derecho de voto que establece el l¨ªder peneuvista a los no nacionalistas.
Por la ma?ana, Zapatero recibi¨® en su despacho el documento que la direcci¨®n del PNV acababa de aprobar en contra del pacto. Algunos de los contenidos le parecieron inadecuados y basados en la etapa de la dictadura. "A m¨ª no me pueden hablar de franquismo. A m¨ª, que los franquistas fusilaron a mi abuelo".
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