El cantaor Capullo de Jerez incluye su flamenco m¨¢s genuino en un disco

Personaje y cantaor inconfundible, larguirucho y flaco, de voz muy personal y estirpe terremotista, Miguel Flores, Capullo de Jerez, acaba de editar el disco de su vida, un repaso a sus mejores cantes y letras que ha grabado Al¨ªa Discos y que el artista jerezano (1954) presenta esta noche en la Sala Apolo del Paralell. El disco se llama ?ste soy yo, como si fuera una presentaci¨®n, aunque Capullo grab¨® ya hace nueve a?os un disco mal promocionado, y aunque los aficionados conocen bien su personalidad inclasificable, su eco antiguo y moderno a la vez, su forma exagerada de abrir la boca para soltar el cante como si fuera fuego.

El cantaor Capullo de Jerez es una instituci¨®n paya en su ciudad, tal vez el ¨²nico lugar del mundo donde hay payos que parecen m¨¢s gitanos que los propios cal¨®s. Vive en el Barrio de la Asunci¨®n, en una modesta casita baja, y toda su familia respira flamenco (tiene un t¨ªo que baila por buler¨ªas con la escoba mientras barre la casapuerta).

La cara impresionante de Capullo, que seg¨²n se dice pudo ser tan buen centrocampista como M¨¢gico Gonz¨¢lez, fue la portada del libro de fotograf¨ªas flamencas de Alberto Schommer.

Pero ahora, por fin, llega la hora de la verdad para su cante inimitable. Sole¨¢ por buler¨ªas, tanguillos, dos buler¨ªas, un martinete ("a mi manera"), tangos, fandangos y rumbas dan luz al disco que Flores ha dedicado a Camar¨®n, "porque s¨¦ que ¨¦l lo hubiera escuchado con tanto cari?o como yo lo escuchaba a ¨¦l".

Sencillo y limpio de rarezas instrumentales (geniales las guitarras de Ni?o Jero y Diego Amaya), ?ste soy yo es la obra genuina de un cantaor ¨²nico, lleno de un talento extra?o y magn¨¦tico.