"Yo era un experto en bailar el tango"

Pregunta. ?Jura decir la verdad, toda la verdad y nada m¨¢s que la verdad?Respuesta. Completamente.

P. Mucho se ha tenido usted que enmendar, visto lo que le ha crecido la nariz en sus 17 a?os de portavoz.

R. No, al menos conscientemente. El 90% de la actividad del Papa es p¨²blica. Si la retocas o la interpretas, es in¨²til.

P. Confiese su bola m¨¢s clamorosa en el cargo.

R. Ninguna tan gorda que haya hecho desaparecer a la Iglesia del panorama del mundo [risas].

P. Cuando, de estudiante, representaba al Calixto de La Celestina, ?se imaginaba que le esperaban mayores teatros?

R. No. Pens¨¦ que aquella ¨¦poca estaba clausurada.

P. De Calixto a este despacho, ?la diferencia es notable?

R. Digamos que el paso intermedio fue Hamlet [risas].

P. Tanto el Papa como usted han tenido un pasado de actores. ?Les ha sido ¨²til?

R. No se trata de enga?ar a la gente, porque el actor, si es bueno es aut¨¦ntico, y transmite situaciones an¨ªmicas que son reales.

P. ?Qu¨¦ queda del trovador de sus a?os de periodista?

R. Poco. Ahora cojo la guitarra alguna vez, cuando estoy solo.

P. ?Y qu¨¦ se canta?

R. Pues My way, de Frank Sinatra. Tiene una letra estupenda: "Ahora que estoy llegando, cuando el tel¨®n est¨¢ a punto de bajar, lo ¨²nico que tengo que decir es que he vivido a mi manera".

P. ?Bailar le gusta?

R. Me gustaba. Era un experto en tango. Form¨¢bamos una pareja sofisticada, mi hermana, que luego muri¨®, y yo. Era una cosa de espect¨¢culo.

P. De su arte torero, ?conserva algo m¨¢s que los pases?

R. Guardo todav¨ªa una fotograf¨ªa de chaval. Mi inter¨¦s por los toros era m¨¢s que nada teor¨¦tico: aqu¨ª hay algo m¨¢s que el que un t¨ªo mate un toro. Me fui a la finca de ?lvaro Domecq padre, el rejoneador, y tore¨¦, para entender un poco estas cosas.

Vamos, no s¨¦ qu¨¦ tiene la Piquer. Por el tipo de trabajo, por respeto a las personas, tienes que estar adecuado. Cuando estoy solo, es el blue jeans y un buen su¨¦ter.

P. Cuando era periodista, ?se hubiera conformado con una informaci¨®n como la que usted da?

R. Cuando era periodista no vine nunca a esta oficina de prensa.

P. ?Ha dado a probar al Papa el jam¨®n ib¨¦rico?

R. No. Nunca le he tra¨ªdo nada espa?ol de comer.

P. ?Su Santidad tiene buen diente?

R. Come poco. Est¨¢ m¨¢s escuchando lo que se habla, y, al terminar, le preguntas qu¨¦ ha comido y es incapaz de acordarse.

P. Si no come, ?qu¨¦ rasgo civil destacar¨ªa de ¨¦l?

R. El buen humor.

P. ?En el Vaticano, todos los prelados creen en Dios?

R. S¨ª.

P. ?Est¨¢ seguro?

R. Puedo decir que, desde que estoy aqu¨ª, mi impresi¨®n sobre la Le he dicho que iba a ser sincero: es la pereza.

P. ?D¨®nde deja la vanidad?

R. A los 17 a?os, ser vanidoso es una necesidad; por encima de los 45 es una memez.

P. De la corte celestial, ?a qui¨¦n le gustar¨ªa parecerse?

R. Si uno espera tener acceso, lo mejor es parecerse a uno mismo, con todos sus defectos.

P. Cuando le canonicen, que sea modelo Navarro.

R. S¨ª. Modelo para m¨ª, con todas mis miserias.

P. ?Ser del Opus es lo mejor que le ha pasado en la vida?

R. Sin duda, sin duda. Lo digo con toda sinceridad, no como f¨¢cil propaganda.

P. Antes hablaba de "la posici¨®n de la Iglesia" toc¨¢ndose el pecho. ?Est¨¢ que se sale de poder¨ªo?

R. No, no, no. Es que me siento Iglesia. Un cristiano de a pie se tiene que sentir Iglesia.

P. ?Se aprende mucha pol¨ªtica en la Santa Sede?

R. S¨ª, con P may¨²scula. No politiquilla o tacticismo, sino, como dec¨ªa Plat¨®n, preocupaci¨®n por la polis, por la comunidad.

P. Dentro de la curia existen el codazo, la zancadilla, el tirarse del mo?o.

R. S¨ª, s¨ª. Cualquier persona que conozca al ser humano no se puede sorprender de que haya esas peque?eces.