La vida cotidiana de la Catalu?a g¨®tica, en un libro de divulgaci¨®n

?C¨®mo eran las costumbres, la indumentaria, las casas, las relaciones familiares, el trabajo y la religiosidad de los habitantes de la Catalu?a medieval? Estas son algunas de las preguntas que intentan responder el historiador Jordi Bol¨°s y el fot¨®grafo Ramon Manent en el libro La vida quotidiana a Catalunya en l'¨¨poca medieval (Edicions 62). Se trata de un volumen destinado a la divulgaci¨®n que, a pesar del t¨ªtulo, se concentra en los ¨²ltimos siglos de la Edad Media, los que se corresponden con el arte g¨®tico (siglos XIII, XIV y XV). El libro combina un repaso a las fuentes documentales y a art¨ªculos y libros precedentes con fotograf¨ªas de obras de arte que ayudan al lector a trasladarse a la ¨¦poca."Queremos introducir al lector en la vida de la ¨¦poca, cosa que constituye el sue?o de cualquier historiador", se?ala Bol¨°s, profesor de Historia medieval en la Universidad de Lleida. A juicio de Bol¨°s, la gran diferencia entre los habitantes de la Catalu?a de hace 500 a?os y la de hoy estriba en "los contrastes sociales que hab¨ªa entonces y en que exist¨ªa m¨¢s violencia cotidiana".

Bol¨°s ha utilizado inventarios de bienes para explicar al lector qu¨¦ objetos conten¨ªan las casas urbanas, mas¨ªas, castillos y monasterios. Tambi¨¦n ha utilizado pasajes de autores como Bernat Metge o Francesc Eiximenis para hablar de las costumbres. Cartas privadas, recetarios, bandos y normativas, actas notariales, contratos de aprendizaje, y documentaci¨®n judicial, entre otras fuentes, completan los recursos de los que ha echado mano el autor del texto, quien tambi¨¦n se ha fijado en los ambientes m¨¢s marginales.

Manent, por su parte, ha realizado un trabajo paralelo de investigaci¨®n en lo que respecta a las obras de arte, retablos, miniaturas y esculturas. "El arte religioso de la ¨¦poca nos proporciona mucha informaci¨®n porque los artistas y artesanos representaban a los personajes con indumentaria contempor¨¢nea", asegura. El fot¨®grafo explica que, adem¨¢s de ilustrar, las im¨¢genes que contiene el libro son "una invitaci¨®n a despertar la curiosidad del lector, a que mire las pinturas y esculturas de una manera distinta". As¨ª, las im¨¢genes del libro se fijan en detalles, como unas gafas, tejidos estampados, jarras, zapatos e instrumentos.