EE UU gana en la ONU

Washington ha conseguido rebajar para siempre su aportaci¨®n al presupuesto de Naciones Unidas

Estados Unidos ha ganado la partida. Ha rebajado su aportaci¨®n al presupuesto ordinario de Naciones Unidas del 25% al 22%, y ha conseguido adem¨¢s que ese 22% no pueda incrementarse nunca. El acuerdo financiero del 23 de diciembre fue saludado por el secretario general, Kofi Annan, como "el mejor regalo de Navidad", pero ha dejado un regusto amargo entre muchos .El embajador de Washington ante la ONU, Richard Holbrooke, se fij¨® como objetivo acabar con la crisis presupuestaria entre su pa¨ªs y la ONU, abierta en 1995, cuando el Senado estadounidense, de mayor¨ªa republicana, decidi¨® interrumpir la aportaci¨®n anual hasta que se redujera la cuota. Holbrooke, que dejar¨¢ el cargo en pocas semanas, en cuanto George W. Bush, nombre a su sustituto, apur¨® las negociaciones hasta el ¨²ltimo minuto y aprovech¨® la revisi¨®n quinquenal para lograr su objetivo.

Logr¨® que la aportaci¨®n al presupuesto bajara del 25% al 22%, como exig¨ªa el Senado, pese a que la econom¨ªa estadounidense hab¨ªa hecho el recorrido inverso: supon¨ªa el 22% de la riqueza mundial hace 10 a?os, y ahora supera el 25%. Adem¨¢s, el 22% qued¨® fijado como lo m¨¢ximo que puede pagar un pa¨ªs. Y redujo la aportaci¨®n al fondo de operaciones para el mantenimiento de la paz del 31% al 27% en 2001 y el 26% en 2003.

"Estados Unidos ha logrado romper un principio que parec¨ªa intocable, el de que paga m¨¢s quien m¨¢s tiene. Esto es un mal precedente, con un elemento positivo: se ha solucionado el problema financiero y se ha puesto fin al distanciamiento entre Estados Unidos y la organizaci¨®n", coment¨® Inocencio Arias, embajador espa?ol ante la ONU.

Espa?a es uno de los pa¨ªses beneficiados por la revisi¨®n, porque su cuota se rebaja unas d¨¦cimas, hasta el 2,55%. Su aportaci¨®n se mantendr¨¢ en torno a los 27 millones de d¨®lares anuales (unos 4.725 millones de pesetas). Pero la ligera reducci¨®n, que ha beneficiado a casi toda la Uni¨®n Europea (salvo Reino Unido, que adelanta a Italia y se convierte en el quinto contribuyente, y a Jap¨®n, no impide una sensaci¨®n general de agravio. "He notado mucha amargura", reconoci¨® Holbrooke, "pero creo que con el tiempo quedar¨¢ claro que el acuerdo es positivo para todos".

Jap¨®n y la UE aportan m¨¢s del 50% del presupuesto. Jap¨®n paga el 19%, seg¨²n el nuevo reparto, pese a que su econom¨ªa es s¨®lo la mitad que la estadounidense. "Holbrooke nos ha retorcido el brazo y nos ha obligado a aceptar porque jugaba con ventaja: la ONU no pod¨ªa seguir funcionando sin recibir dinero de su miembro m¨¢s rico", coment¨® un representante latinoamericano. La mayor parte de los pa¨ªses de la UE, entre ellos Espa?a, eran contrarios a la rebaja para EE UU. Pero las fisuras abiertas en el bloque europeo (el Reino Unido se puso del lado de Holbrooke, y Dinamarca y Holanda se mostraron tibios) y la habilidad diplom¨¢tica del embajador estadounidense, que supo ganarse a decenas de pa¨ªses no alineados con la promesa de que la revisi¨®n les beneficiar¨ªa, dieron la victoria a Washington. Singapur (cuya aportaci¨®n para operaciones de paz sube de un mill¨®n a 10 millones de d¨®lares), Corea del Sur, Argentina, Brasil, los Emiratos ?rabes Unidos, Arabia Saud¨ª y Om¨¢n sufren las mayores subidas.

"Es un abuso, porque nuestra riqueza depende de algo que no durar¨¢ siempre, como el petr¨®leo, y esa temporalidad deber¨ªa tenerse en cuenta", protest¨® un representante de los Emiratos. Otros pa¨ªses rechazan el argumento, y alegan que las cuotas volver¨¢n a ser revisadas en 2006 y que no es previsible un agotamiento del petr¨®leo en ese plazo.

La aportaci¨®n de cada uno de los 189 pa¨ªses miembros al presupuesto general de la ONU corresponde, en teor¨ªa, al porcentaje que su econom¨ªa representa dentro de la mundial, ponderado a lo largo de un quinquenio. En la pr¨¢ctica, manda la pol¨ªtica. EE UU pagar¨¢ menos de lo que le corresponder¨ªa (22% en lugar del 25,8%, por lo que en 2001 no llegar¨¢ a los 300 millones de d¨®lares), y Jap¨®n, m¨¢s (200 millones el a?o pr¨®ximo.) Espa?a, que representa el 2,3% de la econom¨ªa mundial, paga el 2,5%.

Ahora falta que Estados Unidos cumpla su parte del compromiso y pague los atrasos, que debe aprobarse en el Senado. Para empezar, hay desacuerdo sobre la cifra: la ONU estima la deuda en 1.300 millones de d¨®lares, y el Senado, en 800. El embajador chino, Wang Yingfan, dijo por su parte que Washington deb¨ªa pagar su deuda "completa, a tiempo y sin condiciones".

Holbrooke asegur¨® que hab¨ªa hablado con Colin Powell, el secretario de Estado nombrado por Bush, y que ¨¦ste le hab¨ªa dado garant¨ªas de que la mayor¨ªa republicana aprobar¨ªa la regularizaci¨®n de las aportaciones y el pago de atrasos.