Grecia 2001
Grecia tiene un motivo a?adido para recordar el cambio de milenio. Desde el pasado d¨ªa 1, se ha convertido en el duod¨¦cimo Estado miembro en adoptar la moneda ¨²nica, siendo el primero en hacerlo tras la creaci¨®n de la UEM en 1999. Aunque Grecia ha adoptado el euro con dos a?os de retraso, su entrada es valorada como un hito hist¨®rico. A diferencia del resto de los pa¨ªses out (Dinamarca, Reino Unido y Suecia), su incorporaci¨®n estaba a expensas de cumplir con los criterios de convergencia, ya que Grecia ha mostrado un sentimiento favorable al euro (casi dos de cada tres griegos son partidarios del euro).
La entrada estaba descontada desde la primavera pasada, cuando la Comisi¨®n Europea y el BCE coincidieron en dar el visto bueno a la entrada de Grecia. Esta recomendaci¨®n positiva, tras examinar los criterios de convergencia, fue acompa?ada de un par de advertencias respecto a la sostenibilidad del proceso de convergencia, en materia de precios y de deuda p¨²blica. Y es que la profunda tradici¨®n inflacionista de la econom¨ªa helena, junto con su elevado d¨¦ficit p¨²blico, han sido los dos grandes desequilibrios desde mediados de los noventa. La combinaci¨®n de una pol¨ªtica monetaria restrictiva, junto con el proceso de consolidaci¨®n fiscal, apoyado m¨¢s en un fuerte incremento de los ingresos que en una contenci¨®n del gasto p¨²blico, y la moderaci¨®n salarial han permitido reducir la inflaci¨®n y crear las condiciones para lograr la estabilidad macroecon¨®mica. A la econom¨ªa le ha sentado bien el proceso de ajuste. As¨ª, la inflaci¨®n es inferior incluso a la de siete pa¨ªses de la UEM, y para el a?o pr¨®ximo se prev¨¦ que las cuentas p¨²blicas alcancen un super¨¢vit, mientras, con la ¨²ltima bajada de 100 puntos b¨¢sicos, los tipos de inter¨¦s oficiales han convergido a los oficiales de la UEM y el tipo de conversi¨®n del dracma con el euro se ha fijado en 340,75.
Grecia llega al euro dos a?os m¨¢s tarde, con los deberes hechos, aunque con otros por hacer -
Desde 1996, la econom¨ªa griega ha crecido ininterrumpidamente por encima de la media europea, siendo la segunda econom¨ªa m¨¢s din¨¢mica despu¨¦s de Irlanda. Con todo, con una renta per c¨¢pita que se sit¨²a en el 67% de la media de la UE, la convergencia real sigue siendo una asignatura pendiente. Lo mismo que la profundizaci¨®n en las reformas estructurales y liberalizadores, que hasta ahora se han circunscrito a sectores como el energ¨¦tico y las telecomunicaciones, que mejoren la competitividad de la econom¨ªa. El sector bancario, que parece estar plenamente preparado para el euro, tambi¨¦n ha experimentado cambios: se ha enfrentado a un importante estrechamiento de sus m¨¢rgenes por la convergencia a los tipos de la UEM, lo que se espera contrarrestar con un notable crecimiento del volumen de pr¨¦stamos. ?ste podr¨ªa convertirse en un acicate para alianzas estrat¨¦gicas transfronterizas con otros bancos europeos, ya que las alianzas o fusiones a nivel nacional no parecen muy plausibles, dado su alto nivel de concentraci¨®n. En definitiva, quedan muchas cosas por hacer.
Sonsoles Castillo es economista del Servicio de Estudios del BBVA.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.