Las prisas del ingreso en la c¨¢rcel

El encarcelamiento preventivo de Mitterrand, es una de las m¨¢s de 21.000 ¨®rdenes de este tipo dictadas en Francia durante el 2000. Adem¨¢s, fue una de las ¨²ltimas. Si el instructor de su proceso hubiera esperado diez d¨ªas m¨¢s, ya no habr¨ªa podido decidir su ingreso en prisi¨®n. ?ste es otro de los datos manejados por los abogados defensores del hijo del ex presidente para se?alar la man¨ªa persecutoria del magistrado Philippe Courroye.

A comienzos de a?o ha entrado en vigor una norma por la que un instructor necesita la aprobaci¨®n de un segundo juez, llamado 'de libertades y de la detenci¨®n provisional', para decidir el env¨ªo de alguien a prisi¨®n. La reforma se inserta en la ley de la presunci¨®n de inocencia, promovida por la anterior ministra de Justicia, Elisabeth Guigou -hoy encargada de la cartera de Empleo y de la Solidaridad-, que tropieza, eso s¨ª, con dificultades de aplicaci¨®n a causa de la escasez de jueces para cubrir los nuevos puestos.

Los abogados de los implicados en el sumario por el tr¨¢fico de armas entre Francia y Angola han presentado tres demandas de nulidad de todo lo actuado en Par¨ªs, alegando vicios de procedimiento. Mientras, acaba de abrirse en Suiza una causa por blanqueo de dinero, que implica al hijo de Mitterrand, en el marco de la cual han sido bloqueadas diez cuentas bancarias, seg¨²n el fiscal de Ginebra.