Guardiola logra el triunfo en el descuento

A falta de juego, en espera de que la directiva repinte de una vez la casa para el a?o que viene, el Barcelona vive colgado de las dos porter¨ªas, de manera que cada partido provoca v¨¦rtigo. Los goles van y vienen en uno y otro marco. De la misma manera que se tensa en ataque, el equipo se afloja en defensa. El asunto est¨¢ en meter un tanto m¨¢s que el contrario. El que desequilibr¨® la contienda de ayer lleg¨® en el ¨²ltimo minuto, con el reloj a cero, y a bal¨®n parado en un libre directo transformado por Guardiola. No marc¨® el capit¨¢n por azar, sino por convicci¨®n.

Guardiola viene pidiendo una nueva oportunidad para el Barcelona en la Liga. Los adversarios apuestan a que no llegar¨¢ al liderato porque su f¨²tbol es demasiado confuso. El equipo azulgrana, sin embargo, se resiste a que le descuelguen, y ya lleva 12 partidos sin perder. M¨¢s que de juego, es un asunto de fe. Y de ah¨ª la trascendencia del gol de anoche y de su autor. Guardiola no ha metido muchos tantos en su vida, y ayer hab¨ªa quien murmuraba cuando pidi¨® la pelota en la prolongaci¨®n para tirar un libre directo que supon¨ªa la gloria o la tragedia. Y el capit¨¢n, seguro como est¨¢ de que habr¨¢ que contar con su equipo para cualquier c¨¢bala, clav¨® la pelota en la escuadra.

El gol, que dio paso a un tercero, cerr¨® un partido que expres¨® el quehacer azulgrana. Jugando f¨¢cil, de manera acad¨¦mica, los azulgrana alcanzaban con comodidad el ¨¢rea contraria. Fracasaban, sin embargo, en el ¨²ltimo pase, quiz¨¢ porque estaban m¨¢s festivos que concentrados, m¨¢s artistas que futboleros, y se aflojaban ante Bizzarri.

El ron-ron pucelano provoc¨® la salida azulgrana del partido, y en la misma medida en que en el arranque se le apreciaban las virtudes, afloraron los defectos. Con uno menos por la expulsi¨®n de Abelardo, Serra reaccion¨® dibujando una alineaci¨®n menos fracturada: Reiziger entr¨® por Petit y Guardiola pas¨® a jugar de medio centro. Y encontr¨® el gol en los primeros intercambios del segundo acto: el capit¨¢n bot¨® un c¨®rner, el portero se comi¨® el centro y Kluivert cabece¨® impecablemente. La ventaja s¨®lo le dur¨® tres minutos. No cuesta nada meterle un gol al Barcelona y el Valladolid empat¨® en una jugada que resumi¨® todas las carencias azulgrana: inconsistencia, desorden defensivo y p¨¢nico en los rechaces en ¨¢rea propia. El tanto de Caminero destempl¨® a los barcelonistas, que hasta el descuento no resolvieron.