El alto cargo del Imefe destituido el jueves fue denunciado hace dos a?os

Jos¨¦ Luis Solana, el adjunto a la gerencia del Imefe (Instituto Municipal de Formaci¨®n y Empleo), destituido el jueves, ya fue denunciado en mayo de 1999 por un profesor de restauraci¨®n de muebles. En ese momento, la entonces concejal y actual diputada Marisa Castro (IU) exigi¨® la destituci¨®n de Solana, pero tanto el gerente del Imefe, Ricardo Peydr¨®, como la concejal presidente del organismo, Mar¨ªa Antonia Su¨¢rez, le mantuvieron en el cargo. Seg¨²n manifest¨® el profesor, y m¨¢s tarde admitieron Solana y Peydr¨®, el adjunto encargaba a los alumnos y profesores del Imefe trabajos particulares para que los llevaran a cabo en las horas de clase.

Ahora, la causa de la destituci¨®n de Solana ha sido otra: su amistad con un socio del grupo empresarial que cobr¨® al Imefe y a la UE por determinados cursos a presos que no se impartieron.El profesor de restauraci¨®n denunci¨® que Solana le hab¨ªa ordenado que en sus clases arreglaran varios objetos de su propiedad. El primer encargo fue en septiembre de 1996. Los alumnos y el profesor tuvieron que restaurar el cabecero de una cama modernista del siglo XIX propiedad de Solana. El profesor calcul¨® que ¨¦l y sus alumnos emplearon varios meses para arreglarlo. Incluso un funcionario que hac¨ªa por entonces las veces de ch¨®fer del adjunto a la gerencia asegur¨® que ¨¦l personalmente se hab¨ªa encargado de traer y llevar el cabecero de cama desde la residencia de Solana hasta los talleres del Imefe y viceversa. No pararon aqu¨ª las imposiciones de Solana. Meses despu¨¦s del episodio del cabecero, un ordenanza apareci¨® en la clase de restauraci¨®n con una talla de madera de San Antonio de 23 cent¨ªmetros de altura mordida por la carcoma. Tambi¨¦n pertenec¨ªa al adjunto a la gerencia. A la talla siguieron dos peque?as estatuas chinas y dos im¨¢genes de v¨ªrgenes.

Solana admiti¨® haber hecho los encargos, pero asegur¨® que lo hab¨ªa hecho para procurar a los alumnos material de pr¨¢cticas: 'Es una especie de colaboraci¨®n voluntaria. No lo hago yo solo, y existen unas reglas: tienen que ser objetos que no valgan mucho, y uno se tiene que hacer responsable del arreglo'. El profesor calcul¨® que con los encargos Solana se ahorr¨® 'm¨¢s de un mill¨®n de pesetas' y neg¨® que las piezas que arreglaron tuvieran poco valor.

Tambi¨¦n el gerente del Imefe justific¨® entonces el comportamiento del ya destituido Solana: 'Est¨¢ claro que lo mejor es que se restauren muebles y objetos del Ayuntamiento, pero a veces, y sobre todo cuando son piezas muy peque?as, es dif¨ªcil encontrar objetos [para las pr¨¢cticas]'.

Solana reconoci¨®, no obstante, que 'si se mira desde fuera, puede que parezca mal lo que se hace en el Imefe, y tal vez se deber¨ªa abrir la mano y anunciar a los ciudadanos que tambi¨¦n pueden traer sus obras de arte para que las arreglen'. El profesor asegur¨® que fue despedido en 1997 por negarse a llevar a cabo m¨¢s trabajos particulares de Solana.